Fuentes de los servicios jurídicos municipales han asegurado que «el procedimiento para adjudicación de la obra ha sido escrupuloso con la legalidad vigente en todos sus términos». De hecho, la actual mesa de contratación está solo integrada por técnicos y no hay presencia de ningún político. Las mismas fuentes aseguraron que el procedimiento todavía no ha culminado por lo que la adjudicación aún no es definitiva. Según el procedimiento legal, las adjudicaciones pasan por tres fases diferentes. En primer lugar se abre un primer sobre para comprobar que las empresas aspirantes a la adjudicación cuentan con toda la documentación requerida. Una vez superado este trámite, se aborda una segunda fase de la documentación, concretamente la que hace referencia a los criterios técnicos y económicos. Es en ese momento en el que, días atrás, la mesa de contratación designó a Pavasal como adjudicataria al presentar una buena oferta técnica y sobre todo económica con 475.000 euros menos que el precio inicial de licitación. 1.875.000 euros. Sin embargo, todavía queda pendiente la última fase para que a adjudicación sea definitiva. En este caso, está previsto que la mesa de contratación se reúna el día 27 de agosto para comprobar que la documentación administrativa que exige la Ley está correcta. Es en este caso en el que la empresa deberá aportar una declaración jurada de que no obra contra ella condena o sentencia firme por delitos de asociación ilícita o infracción grave, entre otros.