Las donaciones en 2013 descendieron en la provincia de Alicante como se puso de manifiesto en la asamblea provincial de donantes de sangre celebrada ayer en Pinoso. La bajada registrada con respecto al año 2012 fue de 3.497 donaciones menos ya que mientras en 2012 el número total de extracciones fue de 61.409 ese mismo dato el pasado ejercicio fue de 57.912. Por otro lado, el número de donantes nuevos de 2013 fue de 7.606 y el total de 38.524.

Estos son los datos que se conocieron en la celebración de la asamblea anual de la Asociación Provincial de Donantes de Sangre. En la «Casa del Vino» se reunieron unos 150 socios donde, además de presentar la memoria anual de la asociación, se habló del nuevo reto de la organización que es aumentar el número de donantes de médula ósea.

Ante la bajada en el número de extracciones, el presidente de la organización provincial, Juan Collado, animó a los asistentes para incentivar las donaciones.

No obstante, desde el Centro de Transfusiones de Alicante se indicó que «también ha disminuido la necesidad de sangre con lo que el año 2013 estuvo equilibrado». Esto se debe al descenso del número de accidentes de tráfico y sobre todo, a la mejora en los métodos de transfusión sanguínea.

Las cifras de donaciones en los primeros meses de 2014 en el Alto y Medio Vinalopó ya se conocen (2.531) y se mantienen estables. Estas dos comarcas son, por detrás de la Foia de Castalla, las que mayor número de donantes registran. En la zona de Villena, el número de extracciones, en los meses de enero a abril, alcanzó las 659 mientras que en Elda y las poblaciones cercanas llegó a las 1872.

Espacio público

Después de la reunión, el alcalde junto a directivos de la asamblea provincial, encabezados por su presidente, Juan Collado, inauguraron el monumento «El Pinós al Donant de Sang». El parque dedicado a los donantes de sangre que se ha levantado en un rincón del barrio de Santa Catalina, en un solar con forma triangular que ha sido dotado de un muro, bancos, jardineras y una fuente.

Uno de los elementos singulares de la zona de esparcimiento, que ha sido remodelada, es la «Puerta de la Vida» en reconocimiento al gesto solidario de quienes donan su sangre para salvar vidas. Se trata de una puerta de forja restaurada que pertenecía a un conocido jardín privado del pueblo y que siempre permanecerá abierta «para simbolizar que la donación de sangre es una apuesta por la vida», tal y como explicó el alcalde Lázaro Azorín.