Un paisaje gris, humeante y desnudo reducido a cenizas y con un fuerte olor a quemado donde solo fluye el agua. Así ha quedado el cauce del río Vinalopó en la partida rural de El Chorrillo, entre los términos de Elda y Sax, tras el incendio que al mediodía del lunes arrasó 80.000 metros cuadrados de cañar, carrizal, matorral y taray.

Los agentes medioambientales de la Generalitat y del Seprona de la Guardia Civil siguen con sus investigaciones para tratar de determinar el origen de un incendio que generó una columna de humo negro visible a 20 kilómetros de distancia, y cuyas cenizas fueron arrastradas por el cielo a 10 kilómetros. De las pesquisas nada ha trascendido pero este diario ha podido saber, por fuentes vecinales, que horas antes de producirse el fuego se había realizado una pequeña quema controlada de restos de poda en una finca próxima al cauce.

El concejal de Medio Ambiente de Elda, el popular Jesús Sarabia, ha guardado un hermético silencio al respecto aunque desde su departamento se ha confirmado que la temporada de quemas está abierta y que cada mes se pueden realizar entre 40 y 50 en todo el término. Las autorizaciones se otorgan en el Ayuntamiento por un periodo de entre diez y treinta días, se deniegan en Semana Santa por motivos de seguridad y, a partir de junio, se suspenden hasta el comienzo de la nueva temporada. Además, aunque se haya obtenido el permiso municipal, no se pueden hacer quemas con el nivel de Alerta 3 por elevadas temperaturas o vientos fuertes, extremo que no se produjo en el momento el incendio.

Algunos vecinos de El Chorrillo visitaron ayer la zona y recordaron los momentos de angustia que pasaron cuando las llamas se aproximaban a sus viviendas y a una cuadra de caballos. Afortunadamente no hubo que lamentar ni daños materiales ni personales gracias a la rápida intervención de los bomberos del Área Operativa del Vinalopó, que contaron con el apoyo de las brigadas de la comarca y de los medios aéreos del Consorcio.

Mientras Encuentros del Vinalopó volvió a denunciar ayer el «absoluto abandono» al que las administraciones local y autonómica han sometido al río durante décadas, el grupo socialista de Elda criticaba la política de recortes que ha dejado sin conservación las zonas forestales lo que, a juicio del portavoz Rubén Alfaro, es «terreno abonado para que el fuego se propague como lo hizo amenazando al paraje protegido de El Pantano».

Los socialistas ya advirtieron hace año y medio de la situación en la que se quedaban los parajes de Elda tras suprimir la Generalitat y el Ayuntamiento los programas Pamer y Emcorp que, además de contratar a una treintena de desempleados con una dotación de 135.000 euros, realizaban labores de conservación en polígonos y zonas forestales. Por eso Alfaro le ha pedido a la alcaldesa Pedrosa que priorice la gestión del gasto público y diseñe una estrategia de conservación y mantenimiento de los montes y enclaves naturales.

En el incendio también ardieron varios postes de la línea eléctrica y, cuando los operarios se disponían al mediodía de ayer a cruzar el lecho del río en un camión de ocho toneladas de peso para reponerlos, se quedaron atascados. Fue entonces necesario emplear otro camión para poder remolcarlo.