La presidenta de la Diputación pidió ayer a la Conselleria de Medio Ambiente, Isabel Bonig, una reunión para que le informe sobre el estado de la venta de los vertederos de Xixona y Villena, cuya privatización tiene en marcha la Generalitat. Fuentes de la Conselleria de Medio Ambiente señalaron ayer que el proceso de venta sigue adelante pero que no está cerrado y no hay por ahora novedades.

Tal y como ya publicó este medio hace meses, la Generalitat va a privatizar las plantas de Xixona y Villena para hacer caja, pese a ser de las más rentables. Es más, la de l´Alacantí disponía hace dos años de seis millones de beneficios. Precisamente el Ayuntamiento de Xixona aprobó la pasada semana una moción para pedir a Bonig que dé marcha atrás en esta privatización, además de que imponga sanciones y medidas correctoras sobre Piedra Negra tras sobrepasar en 2013, por tercer año consecutivo, el límite máximo de basura autorizada. El tope está fijado en 173.000 toneladas y entraron 184.000. La moción fue apoyada por PSOE y Esquerra-Xixona y contó con el rechazo del PP.

Xixona: «un expolio y un robo»

Piedra Negra está participada en un 51% por la empresa pública de la Generalitat Vaersa, y por un 49% por la mercantil Cespa. El alcalde, Ferran Verdú (PSOE), destacó ayer que esta medida es «un expolio y un robo» a los ayuntamientos que forman parte del Consorcio, y recordó que hace ya más de un año, cuando se supo el plan de desinversión de la Generalitat que incluía la venta de Piedra Negra, «ya pedimos que Luisa Pastor, como presidenta del Consorcio y de la Diputación, que tomara cartas en el asunto».

El pleno de Xixona ha pedido también la convocatoria de una reunión del Consorcio para, entre otras medidas, pedir a la Generalitat que dé marcha atrás en esta venta. También reclama que el Consorcio también reclame sanciones para Piedra Negra.

Por su parte la presidenta del PSOE en las Cortes, Ana Barceló, explicó ayer que su grupo ha pedido la comparecencia de la consellera de Medio Ambiente para que explique «por qué va a poner en venta la planta de tratamiento de residuos de Villena» y que informe sobre «qué se va a hacer con el importe que se obtenga de la adjudicación de esta planta».

La planta de Villena pertenece al 100% a Vaersa y junto con la de Xixona, ambas van a asumir en los dos próximos años un total de 260.000 toneladas de basuras procedente de la Vega Baja por el retraso en la construcción de su vertedero, y a pesar de las molestias que generan los malos olores.