«Tercermundista». Así definió ayer el estado de los juzgados de Elda el diputado de IU en las Cortes, Ignacio Blanco, que visitó la ciudad en su recorrido por los tribunales de la provincia.

«Los funcionarios trabajan en condiciones de inhabilitabilidad, con un mobiliario obsoleto que no cumple las medidas de protección e higiene en el trabajo, con los calefactores llevados de sus casas y con los aseos destrozados», criticó Blanco, «por no hablar de la falta de limpieza, de una mano de pintura y de las cucarachas que salen por el sótano», añadió. Blanco informó de que va a presentar varias preguntas parlamentarias para exigir a la Conselleria de Justicia que destine alguna partida a subsanar las deficiencias de los juzgados de la provincia.

El diputado calculó que si para Alcoy se presupuestó un millón de euros, la cantidad destinada al edificio de Elda debería ser similar. «No hay derecho a que los funcionarios tengan que sacar adelante el trabajo en estas condiciones y que los ciudadanos también tengan que sufrirlas cuando acuden a los juzgados», dijo Blanco.

Por su parte, los responsables del área de Justicia de CC OO y de la Intersindical, Juan José Martínez y María del Carmen Cuenca, criticaron el hecho de que el Consell «no haya invertido un euro desde que se inauguró el edificio en 1981». Y también lamentaron la falta de iluminación en los pasillos, la ausencia de botiquines y el hecho de que uno de los dos ascensores del edificio pase más tiempo averiado que en servicio. Y resaltaron que muchas sillas están hechas jirones y que no hay estanterías suficientes y los expedientes se apilan en el suelo.