Las dudas de IU y UPyD con su consiguiente abstención crisparon ayer los nervios en la sesión plenaria celebrada de forma extraordinaria y urgente para aprobar en sede municipal una modificación urbanística para tratar de salvar las 120 viviendas de La Jaud, sobre las que pesa una orden de derribo dictada por el Tribunal Supremo. El único punto del orden del día puso de acuerdo a PP y PSOE pero las explicaciones del concejal de Urbanismo, Vicente Amat, no convencieron a Luisa Martínez (IU) ni a César González (UPyD). La mayoría se impuso y la modificación número 73 salió adelante pero no con la unanimidad que le habría gustado al gobierno y a los socialistas.

Este trámite de aprobación en sede municipal es indispensable para poder continuar con la tramitación después de que la Conselleria de Infraestructuras y Territorio emitiera el pasado 19 de julio un dictamen favorable a la citada modificación abriendo la vía a la legalización de La Jaud. Ahora, según explicó Amat, el expediente completo volverá a Valencia y es de prever que los vecinos afectados lo soliciten para remitirlo al Tribunal Superior de Justicia.

El Peri-Puente Nuevo lleva una larga y complicada historia judicial y urbanística detrás que ahora se pretende zanjar. El portavoz de UPyD aseguró «desear que este problema se solucione» pero argumentó su abstención en que «nadie ha explicado con qué dinero se van a cumplir las exigencias de la conselleria que pide que se construyan viales, zonas verdes y dotaciones educativas y sanitarias para incluirlo en la revisión del Plan General que tenemos en marcha». «Tampoco sabemos el dinero que lleva gastado el Ayuntamiento en este tema ni lo que supondrá para las arcas públicas que con este procedimiento finalmente no se consiga legalizar las viviendas». E hizo hincapié en que su grupo «no existía en las fechas en que se aprobó La Jaud».

Por su parte, Martínez explicó que «no queremos ser un obstáculo para la posible solución de este problema, por eso no votamos en contra, pero pensamos que las cosas se deberían haber hecho de otra manera». «Esta grave ilegalidad tiene responsables y beneficiarios directos y el Ayuntamiento siempre se ha negado a señalarlos y reprobarlos, algo que habría ayudado a solucionar antes el problema».

Tras realizar varias explicaciones y aclaraciones el edil de Urbanismo emplazó a los «disidentes» a cambiar el sentido de su voto y «levantar la mano por los vecinos de La Jaud porque el apoyo se demuestra ahora votando». Ante su fracaso en este sentido acabó preguntando a Martínez y González «cómo su conciencia les permitirá descansar tranquilos sin haber apoyado a 120 hogares eldenses para que dejen d vivir en la intranquilidad y la incertidumbre».