La prolongación y el redrudecimiento de la crisis económica han terminado por hacer mella en los Moros y Cristianos de Elda, que hasta ahora venían capeando el temporal manteniendo la misma participación de festeros e incluso llegando a aumentarla, como ocurrió de hecho en las pasadas fiestas. Este año, sin embargo, en medio de una complicada situación económica para la que todavía no se vislumbra la luz al final del túnel, la participación en unas fiestas que se encuentran ya en su cuenta atrás definitiva se verá resentida, ante las mayores dificultades para seguir haciendo frente a las cuotas, como admite la Junta Central de Comparsas.
El ente festero que preside Pedro García calcula que el número de bajas, a nivel general entre todas las comparsas, ronda a estas alturas las 30o -en torno a un 5% del total del plantel festero, que actualmente está integrado por unos 6.000 comparsistas-, aunque confía en que se produzcan "altas" de última hora. Aunque hay comparsas, caso de Estudiantes, que contra todo pronóstico dada la situación han sumado 60 altas que se traducen en dos nuevas escuadras mayores y otras dos infantiles, las asociaciones festeras han perdido de media entre dos y cuatro escuadras. Y son cuatro las comparsas que restarán una banda de música, ante la reestructuración de formaciones por las bajas acusadas.
Hasta el momento, y pese a los cuatro años de crisis ya transcurridos, los Moros y Cristianos de Elda habían venido aguantando el tirón a nivel general. Eso sí, unas comparsas mejor que otras. El año pasado incluso aumentó la participación con 200 nuevos festeros, como destacaba ayer Pedro García, presidente de la Junta Central. Este año, sin embargo, la crisis ya está pasando factura. "Estamos acusando las bajas de los festeros que se sumaron el año pasado... y algunas más, pero estos días se están produciendo altas de última hora y esperamos que puedan haber algunas más", añadió Pedro García, que subrayó que lo que no decae, pese a todo, es la participación infantil, que año tras año tanto cuidan los Moros y Cristianos de Elda, ya que no en vano representan el relevo de la Fiesta.
Desfiles del sábado y domingo
La caída de la participación reducirá la duración de las Entradas del sábado y el domingo entre quince y veinte minutos. Si el año pasado las Entradas, haciendo gala de una puntualidad exquisita y sin acusar incidencias, comenzaron a las 18 horas para terminar poco antes de las 23.30 horas, este año se prevé que culminen sobre las 23 horas, según las estimaciones de la Junta Central de Comparsas.
Las mayores dificultades de los festeros para, a nivel particular, hacer frente al pago de las cuotas de las comparsas se producen en un contexto en el que la propia Junta Central afronta un recorte de recursos que, más que nunca, está obligando a "tirar de ingenio". "Cuando llegamos el año pasado para dirigir la Junta, ya estábamos en crisis y ya sabíamos que teníamos por delante cuatro años de mandato que no iban a ser fáciles. Cierto es que tenemos menos recursos y por ello nos hemos centrado en optimizar los gastos, por ejemplo concentrando actos que antes se realizaban por separado. Lo más importante, y en lo que estamos poniendo todos los esfuerzos y el ingenio, es que el festero no note nada diferente en lo que es la esencia de la fiesta y así va a ser", destacó Pedro García que, en la cuenta atrás para las fiestas, invitó a todos los eldenses a "aprovechar los días intensos que tenemos por delante para olvidar los problemas cotidianos y disfrutar".
Los Embajadores estrenarán este año nuevos trajes
La situación de crisis no impedirá que este año los Embajadores de los Moros y Cristianos de Elda estrenen nuevos trajes. Será una de las novedades de estas próximas fiestas, que la Junta Central de Comparsas presentará oficialmente este viernes por la tarde -a las 20 horas- en su sede de la Casa de Rosas. Damián Varea e Isidro Gallardo, embajadores moro y cristiano respectivamente, lucirán así unos nuevos atuendos y colgarán los que hace siete años estrenaron sus predecesores y que ellos mismos llevan luciendo desde 2009. "Creíamos que, después de siete años, ya había llegado el momento y los trajes de los Embajadores serán una de las novedades de estas fiestas", apuntó el presidente de la Junta Central de Comparsas, que avanzó que "son unos trajes más acordes a los tiempos actuales y, sobre todo, muy espectaculares".
