Más de un centenar de personas participaron ayer en el Auto sacramental de la Pasión y Muerte de Jesús de Aspe.
Era la primera vez que se llevaba a cabo esta representación organizada por la Sociedad Musical y Cultural Virgen de las Nieves y la Hermandad del Santísimo Cristo del Perdón y María Santísima de la Humildad y la Amargura, con el fin de engrandecer la Semana Santa y los vecinos respondieron asistiendo masivamente a las dos representaciones previstas.
Aspe se trasladó 2.000 años atrás y revivió los momentos más dolorosos de la vida de Jesús. El domingo 25 de marzo, desde la plaza Mayor, la cruz era trasladada hasta la zona del Calvario, acompañada por la Banda de Cornetas Tambores del Nazareno de Calasparra. Junto a la ermita de la Santa Cruz, los aspenses vivieron momentos de gran tensión cuando un romano a caballo escenificó la muerte de Jesús.
De este modo concluía la representación del Auto sacramental de la Pasión y Muerte de Jesús.
La primera parte del auto sacramental tuvo lugar el viernes 23 de marzo en la plaza Mayor,. El acto se inició con el estreno de la marcha procesional "Oración en el Huerto" de Antonio Espín Moreno. La plaza Mayor de Aspe quedó en silencio, cuando entró la imagen de Jesús, acompañada por los miembros de la Hermandad del Santísimo Cristo del Perdón y María Santísima de la Amargura, bajo los acordes del Prendimiento. El momento más emotivo, se produjo tras la oración de Jesús, cuando el sanedrín junto a un romano atan sus manos con una cuerda, rememorando el Prendimiento, finalizando la primera parte del auto sacramental.
