El Ministero de Fomento plantea tres posibilidades de soterramiento de las vías del tren en Villena, según se especifica en el Estudio Informativo sobre la Integración Urbana de las vías del ferrocarril a su paso por la ciudad. La primera costaría 66 millones de euros y transcurriría desde la calle la Virgen hasta la calle Trinidad. La segunda, valorada en 154 millones de euros actuaría sobre 4 kilómetros, aunque de soterramiento efectivo serían 2,8. La tercera, de unos 3.000 metros de obra y que abordaría 1,6 kilometros enterrados, alcanzaría los 105 millones de euros.

El alcalde, Francisco Javier Esquembre, y el concejal de Urbanismo, Carlos Beltrán, informaron en la noche del miércoles a la Comisión del Especial del Soterramiento de las conclusiones extraídas en la visita que el pasado 16 de noviembre realizaron al Ministerio de Fomento, así como las opciones aportadas en el estudio informativo sobre las vías en Villena. En esta reunión se aprobó la creación de tres comisiones de trabajo. Una dedicada a estudiar las posibles formas de financiación, otra para analizar las mejoras a las tres alternativas, y una última para hacer un seguimiento de los horarios y frecuencias de los trenes que pasan por Villena.

El anterior documento facilitado por el Ministerio de Fomento, la memoria económica sobre las diferentes alternativas, planteó siete opciones de alejamiento de vías, con un coste que osciló entre los 178 millones de euros y 259 millones, y una única alternativa de soterramiento de 138 millones de euros. En octubre de 2010, la entonces alcaldesa, Celia Lledó, traía a Villena el documento con un sabor agridulce, ya que consideraba excesivas valoraciones económicas para la solución de las vías. Atrás quedaba el tiempo de pujar por el alejamiento, opción más valorada por el PP, mientras el Ministerio abogaba por el soterramiento como la más viable.

En mayo de 2011, la secretaria general de Infraestructuras del Ministerio de Fomento, Inmaculada Ruiz-Piñero, apostaba públicamente por el soterramiento. Faltaba ver el informe, que ahora se ha hecho público para determinar que posibilidades de soterramiento existen y así decantarse por una de ellas, dependiendo del importe económico. Un coste, que según los acuerdos, se fraccionaria en tres partes para cada una de las administraciones: local, autonómica y nacional.

En la reunión del miércoles se plantearon algunas sombras sobre la posibilidad de soterramiento, al realizarse un cambio de gobierno central en los próximos días. Ante ello, Beltrán señaló que existe un acuerdo tácito por el que los convenios firmados entre administraciones se continúan, a pesar de los gobiernos que estén en el poder. Otra de las cuestiones que planean sobre la posibilidad de realizar un soterramiento en la ciudad es la financiación. Desde el equipo de gobierno se considera que es el momento de avanzar los diferentes trámites burocráticos. Beltrán indicó que "no hay tiempo que perder y así, cuando la coyuntura económica sea más favorable, iniciar las obras". Por otra parte, el paso de mercancías sigue siendo la clave del soterramiento. Beltrán recordó que estos trenes seguirán circulando por vías de ancho ibérico, a la vez que argumentó que "en tiempos de crisis hay que optimizar recurso" y, por esta razón, "desde el Ministerio se ve factible utilizar el suelo por el que pasan las vías del ferrocarril para evitar expropiaciones inecesarias".