Parte del techo de una vivienda del barrio eldense de Las Trescientas se ha desplomado por las filtraciones de agua mientras los vecinos del segundo bloque, al que pertenece la casa, siguen esperando que el Instituto Valenciano de la Vivienda (Ivvsa) comience las obras de rehabilitación que tendrían que haberse iniciado en el mes de septiembre.

El siniestro se produjo en casa de Ricardo Massi, residente en el segundo bloque, en la galería en la que tiene instalada la lavadora y en la que, afirma, su mujer pasa varias horas al día. Pese a que el derrumbe del techo se produjo ya de noche, mientras estaban durmiendo, el estruendo que provocaron los escombros al caer al suelo y el hecho de pensar que podría haber sido en un momento en el que alguno de los dos se encontrarse en la galería, provocó en la mujer de Ricardo un cuadro de ansiedad, reconocía una de las hijas del matrimonio. "Si llega a pillar a alguno, lo mata", afirmaba el yerno de la pareja mientras señalaba un saco lleno de los escombros que se tuvieron que retirar de la galería.

El derrumbamiento del techo de esta habitación de la casa se une a los sucesos de esta índole que se han ido produciendo en los bloques de Las Trescientas en los últimos años, y que la rehabilitación prometida por la Generalitat Valenciana va encaminada a paliar. La mala canalización de agua de lluvia, unida al mal estado de las tuberías, hace que las humedades sean un problema de lo más frecuente en estas casas, terminando en algunos casos con estancias que se vienen abajo.

Una vez repuesto del susto, Ricardo acudió al Ayuntamiento de Elda a dar parte de lo ocurrido en su casa. Sin embargo, según afirmó a INFORMACIÓN, no ha encontrado una respuesta satisfactoria. Esta denuncia se une a la que hizo en estas páginas hace poco más de un mes, en la que se quejaba de la poca información que tanto desde el Ayuntamiento como desde el Ivvsa se daba a los vecinos del estado de la rehabilitación.

La vivienda de Ricardo, situada en la calle El Greco, no es, según su hija, una de las más deterioradas del segundo bloque. En palabras de la hija del matrimonio afectado, "esto pasa en otra de las casas y no se hubiese venido solo abajo la galería".

Hasta 2012

Pese a los evidentes defectos estructurales de los bloques, a excepción del primero, ya rehabilitado, los trabajos para salvaguardar la integridad de los edificios no se retomarán hasta 2012, según reconoció el Ivvsa el pasado mes de octubre, dado que el proyecto todavía está en manos de la entidad, que tiene pendiente remitirlo a la Dirección General de la Vivienda para su estudio y posterior licitación. La última previsión sitúa en comienzo de las obras en la primera mitad del año, lo que sumará un retraso de 15 meses aproximadamente sobre el primer anuncio, enero de 2011.

Los sucesivos aplazamientos han provocado que los vecinos no quieran oír hablar de plazos, aunque los retrasos no suponen una novedad. El proyecto global de los cuatro bloques del barrio, unas viviendas que superan los 50 años d antigüedad, lleva años rondando, y no se puso en marcha hasta 2007. Si una palabra puede definir la primera fase es "accidentada", con el plante de obreros por no cobrar de las empresas subcontratadas y varios meses de retraso. La segunda fase se comenzó a planear con polémica, por una menor cuantía -alrededor de 900.000 euros- que solo contemplaba refuerzos en áreas comunes frente al arreglo de viviendas particulares que se produjo en el primer bloque, con el consiguiente sobrecoste.