La plantilla de la Policía Local de Aspe lleva más de tres años solicitando una sede "digna" y esta semana lo ha vuelto a reclamar. Lo ha hecho a través del sindicato SPPLB después de que el proyecto de la futura sede policial haya dado lugar a un nuevo enfrentamiento político entre el gobierno popular y la oposición socialista.

Las viejas, pequeñas y precarias dependencias de las que vienen haciendo uso más de 30 agentes se encuentran en los bajos del Ayuntamiento y ocupan una superficie de 60 metros cuadrados. Un escrito del Cuerpo de Seguridad Local ya advertía en la anterior legislatura al equipo de gobierno popular que las instalaciones presentan numerosas irregularidades en materia de seguridad e higiene en el trabajo. Las deficiencias son múltiples. El vestuario mide 20 metros cuadrados y en su interior hay 32 taquillas. En el cuarto que hace las funciones de cocina se encuentran también almacenadas las armas de fuego. Entre el espacio destinado a la atención al público y las oficinas no hay separación, por lo que no existe intimidad a la hora de tomar declaración a los ciudadanos.

Los representantes del SPPLB agradecen la decisión del actual concejal del área, del popular Martínez Soria, de habilitar la nueva sede policial en el almacén municipal que hay junto al tanatorio y, en este sentido, le han pedido a los grupos de la oposición, PSOE y EU, que apoyen la iniciativa para ofrecer un mejor servicio al ciudadano. Máxime teniendo en cuenta que ya hay un proyecto acabado que costó 40.000 euros al Ayuntamiento.

En cualquier caso el sindicato ha solicitado a los técnicos municipales que elaboren un informe sobre las condiciones higiénico sanitarias de la actual sede policial.