Los trabajos de ampliación de la sede de la Policia Local de Elda llevan más de dos meses paralizados por los impagos a las firmas subcontratadas por parte de la empresa adjudicataria Vía Latina, actualmente en concurso de acreedores -antigua suspensión de pagos-, al carecer de liquidez para hacer frente a todas las deudas contraídas.
Las obras de la nueva jefatura policial sufre un nuevo parón, el cuatro en cinco meses, tras constantes situaciones de incertidumbre. La empresa valenciana Via Latina, adjudicataria directa de la obra, había presentado concurso de acreedores, pero los trabajos para rematar la estructura y proceder al desencofrado se retomaron en mayo tras haberse llegado a un acuerdo -compromiso de pago- con la administradora concursal de San Vicente.
Desde el Ayuntamiento eldense afirman no conocer la situación de la empresa constructora ni el porqué los operaciones no vuelven a trabajar, así lo detalló el concejal de Servicios Públicos e Imagen Urbana, Alberto García, quien afirma que la obra de la sede policial es competencia de la concejalía de Urbanismo a cargo de Vicente Amat. Este diario intento contactar en varias ocasiones con el edil del Urbanismo pero no fue posible.
Una obra que no termina
Es la cuarta vez que la actuación sufre un parón desde que el pasado febrero se produjese el primero. En aquella ocasión fue por el reiterado retraso del Consell en el pago de las últimas certificaciones de obra, una razón que la Conselleria de Gobernación negó aunque diez días después los albañiles volvieron al trabajo, justo después de que el Gobierno valenciano ingresara a la adjudicataria el abono de las últimas certificaciones de obra. Pagos que rondaban los 60.000 euros. El segundo parón se produjo en la segunda semana de abril pero las tareas se retomaron a los pocos días. El motivo fue el mismo: el retraso en los pagos a las subcontratas. El tercer conllevo la mala nueva añadida del concurso de acreedores de la constructora adjudicataria de la obra, que incrementa la preocupación de los empresarios afectados. Tras el compromiso de la empresa valenciana a abonar la deuda contraída con la firma de San Vicente que acomete la estructura, las obras volvieron a retomarse, pero los operarios trabajaron escasas dos semanas.
La empresa, que detalló que los trabajos de la estructura estaban a un 95% y que, una vez terminados, se procederá al desencofrado, afirmando que, de no surgir nuevas complicaciones, la obra estaría en plazo. Sin embargo las complicaciones existen y se teme que la sede no vea la luz.
