La Sindicatura de Cuentas de la Comunidad Valenciana ha enviado esta semana a sus técnicos al Ayuntamiento de Novelda para que lleven a cabo una auditoría sobre la delicada situación económica en la que se encuentran las arcas municipales. El órgano autonómico al que corresponde el control externo económico y presupuestario de la actividad financiera y de las cuentas de la Generalitat, de los entes locales y del resto de organismos del sector público valenciano, ya solicitó tres semanas atrás al equipo de gobierno de Novelda, el cuatripartito que forman PSOE, Bloc, Els Verds y EU, la remisión de diversos informes municipales de carácter económico.

Según informó ayer el portavoz del grupo popular municipal, "lo primero que van a examinar es el año 2009, cuyo informe no se presentó por parte del Ayuntamiento a la Sindicatura tal y como debería haberse hecho, pero la auditoría va a centrarse principalmente en el estado del presupuesto, de la contratación y del personal", puntualiza Rafael Sáez para quien lo "más triste de todo este asunto es el hermetismo y el secretismo con el que el equipo de gobierno lo está llevando". Algo que el único grupo de la oposición, el PP, ha querido evitar informando en el día de ayer sobre la auditoría y presentando una pregunta al pleno para el día de mañana.

Denuncia Sáez que en este tema ha faltado información y recuerda, no sin preocupación, que la deuda municipal de Novelda supera y los 33 millones de euros. Se deben concretamente 15,5 millones a los proveedores del Ayuntamiento y 17 millones a las entidades financieras sin contar los intereses. Una circunstancia que también ha sido valorada por la Sindicatura de Cuentas para realizar la auditoría.