El Área de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Pinoso conserva un ejemplar de salamandra común único en la Comunidad Valenciana. Fue descubierto de forma casual en una noche fría y lluviosa de noviembre de 2006 en un campo situado en el paraje natural del Cabezo de la Sal. Los análisis genéticos realizados más recientemente por el Museo de Ciencias Naturales de Madrid han confirmado que se trata de un anfibio "Salamandra salamandra" idéntico al de otras poblaciones presentes en zonas concretas y aisladas de Murcia y Albacete.

Hasta la fecha esta especie no estaba catalogada en la Comunidad Valenciana, de ahí la importancia de un hallazgo que el biólogo del Área de Medio Ambiente de Pinoso ha calificado de "extraordinario". José Carlos Monzó ha explicado en este sentido que, a raíz de este interesante descubrimiento, se pudo recabar el testimonio de diferentes vecinos de la localidad que coincidieron en recordar la existencia, en décadas pasadas, de "una especie de lagartijas de agua, con manchas negras y amarillas, que podían verse con bastante frecuencia en algunos puntos de agua del Cabezo de la Sal". El departamento de Medio Ambiente llegó incluso a grabar varios de estos testimonios como prueba de la existencia de una especie de salamandra que se considera extinguida en tierras valencianas. Precisamente por lo inusual de este hallazgo el grupo de voluntariado ambiental de Pinoso ha intensificado las salidas al campo para escrutar los parajes naturales donde se dan las condiciones propicias de agua y humedad para que este bonito e inofensivo anfibio pueda desarrollarse. Por el momento no se ha hallado ningún ejemplar más de salamandra común pero la esperanza de lograrlo se mantiene.