La polémica suscitada por las voces contrarias al traslado a Madrid del galardón de la "Mujer Mejor Calzada", de las que ayer se hizo eco este periódico, centró la reunión mantenida ayer por el Ayuntamiento de Elda, los empresarios zapateros participantes y el Museo del Calzado para abordar un tema que las partes implicadas en la iniciativa consideran que "se está dramatizando en exceso y sin razón de ser". En la reunión volvió a ponerse de manifiesto el interés mayoritario por parte de los empresarios que patrocinan el premio por revitalizar el galardón. Algo que, según la mayoría, pasa por su celebración en Madrid, aunque no se descarta la posibilidad de realizar asimismo algún tipo de acto en Elda.

La controversia suscitada ha pillado "por sorpresa" a los promotores de la iniciativa, que defienden que la "deslocalización" del premio únicamente responde al interés por darle una mayor, "y muy necesaria", repercusión, ya que en los últimos años el galardón estaba de "capa caída", con una difusión muy limitada que, fuera de la ciudad de Elda, "pasaba totalmente desapercibida". Hay quien apunta, a este respecto que, dados los derroteros que había tomado el premio, su traslado a Madrid representa la única oportunidad que el galardón puede tener para sobrevivir de cara al futuro, ya que de hecho hay empresarios que han puesto sobre la mesa su intención de desmarcarse del evento en el caso de que se mantenga en Elda, por la prácticamente nula repercusión que, a efectos prácticos de promoción, les ha venido representando especialmente en los últimos años.

Argumentos a favor

Así las cosas, la iniciativa sigue adelante a pesar de las voces críticas surgidas en estos últimos días, bajo el convencimiento de que la repercusión que obtendrá el premio en Madrid permitirá que Elda y sus empresas zapateras puedan beneficiarse de una promoción sin precedentes. Grandes empresas como Sacha London, Magrit, Lodi o Rebeca Sanver, entre otras, respaldan el traslado del galardón a la capital. En total, son unas diez empresas las que en los últimos años venían patrocinando el premio, aunque tras plantearse su "mudanza" otras cinco firmas se han mostrado en principio favorables a participar, a expensas únicamente del coste económico que vaya a representar.

Para José Sanchís, gerente de Rebeca Sanver y a la sazón presidente de la patronal autonómica del calzado, mantener en Elda el premio "no tiene sentido, más allá de factores románticos". "Es fundamental darle a esta iniciativa la fuerza que necesita, porque de otro modo el premio acabará desapareciendo irremediablemente. Llevar el evento a Madrid no significa que se reniegue de Elda y desde luego nada tiene que ver con lo que ocurrió con la Ficia. Simplemente, Madrid es un gran escaparate que garantizará al acto una mayor repercusión, que es lo que necesitamos. Mantener el premio en Elda sólo encuentra razón de ser en factores románticos pero, tal y como está la situación, los empresarios no nos podemos permitir guiarnos por romanticismos", afirmaba ayer contundente el empresario. "En Elda ya nos conocen de sobra, lo que necesitamos es que nos conozcan más fuera", añadió el gerente de Rebeca Sanver.

Tras centrar la reunión de ayer la polémica por las críticas recibidas y al no haber podido estar presentes todos los empresarios, el Ayuntamiento, el Museo del Calzado y las firmas zapateras volverán a reunirse en un plazo de dos semanas, ya con el presupuesto en la mano que determinará el coste que deberán asumir cada una de las partes implicadas. La alcaldesa, Adela Pedrosa, destacó ayer que el Ayuntamiento "siempre respaldará la elección de los empresarios, ya que son los que, en definitiva, pueden garantizar que haya inversiones y que se creen puestos de trabajo".