El sector de la construcción sigue en plena caída libre. Así lo evidencian los datos de recaudación por licencias de construcción, tanto de obra mayor como menor, del Ayuntamiento de Elda en los primeros seis meses del año. A fecha de 30 de junio, los ingresos municipales por este concepto se limitaban a 60.483 euros, según los datos facilitados ayer por la portavoz del grupo municipal socialista, Mari Carmen Orgilés.

La concejal del principal grupo de la oposición expresó ayer su preocupación al respecto, teniendo en cuenta que esta cifra representa apenas el 11% del importe presupuestado para el conjunto de 2010 para este concepto, 550.000 euros. Si en el segundo semestre se mantuviera el mismo ritmo en la concesión de licencias, los ingresos por construcción apenas alcanzarían en Elda los 120.000 euros, quedando muy lejos del "objetivo" presupuestado, que ya de por sí se planteó teniendo muy en cuenta la adversa situación económica, y en especial la del sector de la construcción, dejándose muy por debajo de los 1,5 millones que se presupuestaron para el año anterior y que no pudieron alcanzarse.

Orgilés ofreció ayer estos datos en el marco del pleno extraordinario que ayer celebró la corporación eldense, que tenía como uno de los puntos del orden del día la dación de cuentas de los estados de ejecución y movimientos de Tesorería del segundo trimestre de 2010. A este respecto, la portavoz socialista destacó concretamente los datos de la ejecución presupuestaria de los ingresos por construcción por "terroríficos". "No sabemos cómo va a evolucionar la recaudación en el segundo semestre, pero el presupuesto ya se hizo muy ajustado respecto al año anterior, pensamos que de forma correcta, pero a tenor de los datos que nos encontramos a fecha del 30 de junio da miedo que una ciudad como Elda no pueda llegar ni de lejos a unos objetivos tan justos, ya que a estas alturas la ejecución sólo alcanza el 11%".

Modificación de crédito

El pleno aprobó ayer una modificación de crédito por valor de 96.000 euros que, ante las críticas de "improvisación" de los grupos municipales de PSOE y de IU, la concejal de Hacienda, Virginia Romero, justificó en la necesidad del Ayuntamiento de hacer frente a "nuevos requisitos" exigidos para poder acometer las obras del segundo Plan E que no se contemplaban en el primero.