La imagen de Santa Caterina fue objeto ayer de todos los preparativos para su traslado a Castellón. La talla, de más de 400 años de antigüedad, emprenderá el viaje esta misma mañana rumbo a un taller de restauración de Castellón, donde permanecerá hasta que se concluyan los trabajos, no antes del próximo año. Ayer fue cuidadosamente embalada en la iglesia de San Juan Bautista para realizar su traslado con total seguridad, dado el importante deterioro que acusa la imagen, considerada como la joya del patrimonio artístico de Monóvar más antigua de la que por el momento se tiene conocimiento.

Los trabajos de restauración serán sufragados por el Instituto Valenciano de Conservación y Restauración de Bienes Culturales, organismo dependiente de la Conselleria de Cultura. Pese a las peticiones del Ayuntamiento de Monóvar para que los trabajos pudieran estar listos en el mes de noviembre, para que la imagen pudiera estar ya de vuelta para la celebración de la Fira de Santa Caterina, la restauración de la talla, descubierta en 1995 por los investigadores locales Consuelo Payá y Marcial Poveda en un rincón-almacén de la iglesia parroquial, no concluirá hasta 2011.

Aunque se desconoce cuándo aparece por primera vez la talla en Monóvar y quien fue su autor, la primera vez que la imagen de Santa Caterina aparece documentada es en 1637. La imagen de la antigua patrona de Monóvar es una talla policromada sobre una peana de 82 centímetros de altura, que representa a la Santa como una doncella, con corona, cabello muy largo y una sencilla túnica. Su estado de conservación es muy deficiente, por lo que su restauración resulta fundamental.