La sesión plenaria ordinaria del Ayuntamiento de Elda, que se debía celebrar ayer por la mañana, se ha aplazado hasta el próximo mes de septiembre por la ausencia de asuntos municipales que tratar. La prórroga de un pleno, la tercera en lo que va de año, ha provocado una airada denuncia del Partido Socialista, que ayer denunciaba la paralización de la actividad hasta después del verano, cuando hay un puñado de mociones esperando a ser debatidas. Los populares, por su parte, justifican la decisión en un informe emitido por el secretario municipal que desaconseja convocar la sesión por el elevado coste que supone, 4.000 euros, cuando no hay proyectos que tengan que ser ratificados por el pleno.

La portavoz del PSOE, Mari Carmen Orgilés, atacó ayer la decisión asegurando que con la ausencia de sesión plenaria ordinaria se incumple el artículo 46 de la ley de bases del régimen local, que establece que se debe convocar una al principio de cada mes. Además, continuó Orgilés, en todo el mes de junio no se han celebrado tampoco sesiones informativas. De esta manera, según la portavoz socialista, las posibilidades de que la oposición pueda fiscalizar la labor del equipo de gobierno son nulas. "Que no se hayan celebrado plenos en la mitad de lo que llevamos de año, es algo sin precedentes, teniendo en cuenta lo importante que es una ciudad como Elda".

Los meses en los que se ha dejado de celebrar las sesiones plenarias de la corporación municipal de Elda en el presente año son enero, abril y julio.

Miedo a las preguntas

Orgilés cree que la alcaldesa ha decidido aplazar la sesión "porque teme que le pregunten, ya que sólo sabe vender y vender, no responder". Las mociones del grupo municipal socialista que se han quedado en el tintero se debatirán con meses de retraso, ya que agosto se considera inhábil. "Los plenos constituyen la única oportunidad en la que podemos realizar la labor de oposición. Pero la alcaldesa no quiere llevar mociones al pleno.