Una vecina de Biar ha demandado a la Generalitat Valenciana a través de la Asociación Nacional por la Libertad Lingüística (ANLL), por no permitirle escolariza a su hijo de 10 años en castellano en el colegio Mare de Déu de Gràcia, único centro docente público de la localidad. Isabel Aracil ha decidido "plantarle cara a la administración" por sus derechos después que su hijo lleve cinco años matriculado en la línea PIP (Programa de Introducción Progresiva al valenciano) en dicho colegio.

Los trámites comenzaron hace poco más de un mes con la presentación de un contencioso-administrativo en el Procedimiento de Protección de Derechos Fundamentales ante el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV), según informaba ayer el presidente de la ANLL, Pablo Yáñez. Una vez admitido a trámite, Yáñez manifestó que se ha pedido al TSJCV que eleve un recurso de inconstitucionalidad a la Ley de Uso y Enseñanza del Valenciano. "El problema no parte de la aplicación de la ley, sino de la propia ley, que pone en jaque la libertad de las personas para elegir en qué idioma quieren ser educadas". La ley autonómica establece en su artículo 35 que Biar es municipio de predominio lingüístico valenciano, y en las zonas con esta denominación no se exige a los centros de enseñanza pública impartir la línea castellana. "Nos estamos encontrando con casos de padres que tienen que conducir 60 o 70 kilómetros para llevar a sus hijos a Almansa para que puedan ser educados en castellano", manifestaba ayer Yáñez ante la división que la ley establece entre poblaciones según su uso de la lengua.

"No se siente discriminado"

Isabel, nacida en Madrid de padre alcoyano y madre francesa, se estableció hace diez años en Biar y allí reside en una finca familiar con su marido y sus dos hijos, una niña pequeña y el mayor, de diez años de edad. La lucha de Isabel, sin embargo, no ha hecho mella alguna en su hijo, a la postre el principal perjudicado. Según Isabel, él no es consciente de que pase nada raro ni le han dado de lado sus compañeros.

Desde tercero de primaria -ahora mismo está cursando quinto- al niño se le imparte la asignatura de Conocimiento del Medio en valenciano, lo que supone cuatro horas semanales -tres desde la entrada en vigor de la asignatura de Educación Para la Ciudadanía- en las que se utiliza sólo el valenciano. Desde ese mismo curso, según Isabel, han solicitado por escrito ante el la exención del valenciano en esta asignatura.

Esta exención, "que no se difunde ni se presenta como alternativa", supone que el niño acude a dos de estas horas con un manual de la asignatura en castellano y que se examina en ese mismo idioma. La otra de las horas recibe, también en castellano, una hora de clase de refuerzo a la que sólo acude él. Este hecho, indica Isabel, ha despertado las suspicacias de algunos padres que se han quejado de trato preferente a ese alumno por contar "con una hora de clases particulares".

Aunque la situación actual se resuelve con este "parche", como lo denomina Isabel, indica que el problema vendrá cuando comience las clases en el instituto.

En caso de que quisiese que su hijo haga toda la enseñanza en castellano, debería matricularlo en un centro de Villena, algo que sólo podría hacer empadronándose allí "de manera irregular. Yo vivo en Biar, pago mis impuestos en Biar, no tengo por qué buscar otras cosas"

Decepcionada

Isabel considera que tanto el PSOE como el PP en la Comunidad Valenciana "hacen oídos sordos ante este problema". Está, sin embargo, especialmente molesta con la última formación política, a la postre la que gobierna el Consell con mayoría. "El PP no ha cumplido su promesa de defender la libertad lingüística de la gente. Todo lo contrario, se dedican a conceder premios a los colegios que sólo imparten clases en valenciano y a los comercios que rotulan en este idioma".