El proyecto de remodelación de la Glorieta de la ermita de la Divina Aurora de Beneixama, actuación que también incluye la supresión de la Cruz de los Caídos de la dictadura franquista, ha generado una fuerte confrontación política y social en esta tranquila localidad del Alto Vinalopó en la que viven 1.900 habitantes.

La reforma, financiada en su totalidad por la Diputación con una partida ya consignada de 288.000 euros, fue aprobada en el último pleno con los votos a favor del equipo de gobierno de PSOE-Junts Per Beneixama (JPB) y en contra del PP. Sin embargo, días después surgía una plataforma cívica a la que se le ha dado el nombre de "Salvem la Glorieta" que, en apenas una semana, ha recogido 907 firmas para expresar su rechazo a una obra que modifica un espacio emblemático para la población, un pequeño y deteriorado parque históricamente unido a eventos sociales, festivos y religiosos. La Plataforma también ha colocado más de cincuenta pancartas reivindicativas en balcones y ventanas de todo el municipio. Sus miembros exigen que una obra de estas características cuente con el máximo consenso social "y, sobre todo, si con ella desparecen sus elementos más característicos". Esto último en alusión a la Cruz de los Caídos y a la tapia que circunda la Glorieta donde se halla la ermita de la patrona. Consideran, además, que el proyecto supone un perjuicio irreversible para el patrimonio histórico y artístico de Beneixama. Términos en los que coincide la portavoz municipal del PP, Mari Ángeles Rivas, que fue la persona que entregó las firmas en el Ayuntamiento "a título particular". Sin embargo la alcaldesa, la socialista Amparo Barceló, defiende el proyecto porque realzará el entorno de la Glorieta y acabará con el abandono y dejadez que viene arrastrando desde hace muchos años. "Todo el mundo es libre de opinar y firmar lo que crea oportuno pero lo único que pido es que se informen bien, que vengan al Ayuntamiento y consulten el proyecto porque mucho, nos tememos, que desde el PP se está engañando y manipulando a las personas con fines políticos", comentó la alcaldesa advirtiendo de que la mayoría de las firmas están sin cotejar y muchos de los firmantes se están retractando ya.