La multinacional española Actividades de Construcción y Servicio, más conocida por sus siglas ACS y por su presidente, Florentino Pérez, está negociando a través de una de sus filiales, Invexta Recursos SL, convertir los pozos de sal del paraje de Cabezo de la Sal, en Pinoso, en el mayor almacén subterráneo de España de reservas estratégicas de crudo y sus derivados, según la información recabada por este periódico. El diario ya ha informado durante las últimas semanas sobre los primeros movimientos de un proyecto que interesa, principalmente, al Ministerio de Industria y que, ni mucho menos queda al margen del mismo; de hecho, en diciembre del pasado año el Consejo de Ministros dio su autorización a través de un real decreto para la exploración de hidrocarburos y su almacenaje en el Sureste de España y por seis años -lo que se conoce como zonas Aries-1 y Aries-2- que incluían Albacete, Alicante y Murcia. Invexta Recursos, la sociedad limitada adjudicataria de dicha concesión, que está dedicada a actividades de investigación, exploración y explotación de todo tipo de yacimientos y almacenamientos de hidrocarburos encontró en Pinoso lo que estaba buscando aunque no descarta más proyectos en cualquiera de estas tres provincias, asegura Recaredo del Potro, su responsable.

Seguridad

Los informes que maneja la mercantil hablan de una capacidad de almacenaje de hasta dos millones de toneladas, en la que se anuncia como una de las operaciones empresariales más importantes para esta comarca. Los pozos tienen una profundidad de hasta 400 metros y se garantiza la seguridad y la no afección al medioambiente, especialmente, a los acuíferos de la zona. El proyecto, además, incluirá la construcción de un oleoducto de aproximadamente cien kilómetros hasta Cartagena, desde donde se bombearía el hidrocarburo hasta el Vinalopó para su posterior almacenaje. Hasta hace dos meses, Invexta Recursos ha barajado la posibilidad de que este oleoducto tuviera como destino final el puerto de Torrevieja (a 70 kilómetros), lo que ha tenido que descartar por su tamaño y por los problemas que habría para ubicar una toma en alta mar, a través de una boya-bomba acuática, desde la cual pudieran descargar los petroleros.

Además, la filial de la multinacional ACS ya tiene prácticamente cerrado un acuerdo con la empresa que explota los pozos en la actualidad, que es NCAST, la multinacional francesa concesionaria de las salinas de Torrevieja; de hecho, los silos que se utilizarán son, precisamente, los que ésta ha dejado en desuso después de décadas de extracción de sal. De los quince existentes, al menos en la mitad no queda actividad.

Alquiler a una Corporación del Ministerio

ACS tiene en marcha un proyecto que, de entrada, cuenta con el beneplácito del Ministerio de Industria, que es el primer interesado en cumplir una normativa europea que obliga a cada país miembro a contar con una reserva estratégica de crudo y de sus derivados que suponga el 25% del consumo anual, lo que en cifras es para España 15 millones de toneladas de petróleo y de sus derivados. De hecho, ACS lo que haría con este proyecto es gestionar en Pinoso uno de los mayores almacenes de la Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos (CORES), un organismo dependiente de Industria que se creó con esta finalidad. El almacenaje de crudo en subterráneos es un sistema que, hasta ahora, ha sido muy poco utilizado en España, al contrario de lo que ocurre en Europa o EE UU. El de Pinoso sería el más grande del país.