El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) va a sustituir 10.000 viejas traviesas del tipo bibloque RS por las modernas monobloc en diferentes puntos del tramo de vía convencional comprendido entre los términos de Elda y Sax.

Esta renovación abre la posibilidad de que en un futuro se pueda cambiar el actual ancho de vía ibérico -1.668 milímetros- habitual en España y Portugal por el ancho internacional -1.435 milímetros- con el que circulan los trenes de Estados Unidos, gran parte de Europa, Sudamérica y Ásia, el norte de África, Alaska, Australia, Canadá, Irán, Iraq e Israel entre otros muchos países. Pero no es la única ventaja.

El nuevo material abre la posibilidad de aumentar la velocidad de la circulación hasta los 200 kilómetros por hora. Sin embargo, por el momento, los convoyes seguirán cubriendo el trayecto La Encina-Alicante a una velocidad máxima de 160 kilómetros por hora. Las características del actual itinerario férreo entre Elda y Sax hace imposible un aumento de la velocidad por el reducido radio de las curvas y el grosor y dureza de los raíles. Para lograr tal fin se tendría que modificar el trazado para que adquiriese una forma rectilínea o suavizara sus curvas con radios más amplios. La sustitución de los raíles sería otra de las condiciones exigidas.

Los trabajos en los que Adif, la empresa pública dependiente del Ministerio de Fomento, va a invertir 900.000 euros comenzarán a mediados de septiembre y se prolongarán por espacio de varios meses. Sin embargo parte del material ya ha sido depositado junto al actual trazado férreo y su presencia es visible entre la estación de Elda-Petrer y el túnel de La Torreta.

Las traviesas monobloc se fabrican como una sola pieza de hormigón armado y se colocan sobre el balasto con una separación de 60 centímetros. Cada unidad pesa 350 kilos y mide 2,20 metros. Resisten mayores cargas, la materia prima con la que se elaboran es abundante, requieren un mantenimiento menor, ofrecen una mayor durabilidad e incrementan la confortabilidad y seguridad en la circulación de los trenes. Pero también tienen algunos inconvenientes. Entre ellos su excesivo peso, la rigidez de desplazamiento del balasto, la fatiga a los esfuerzos alternados y su posible fisuración.

A pesar de ello ofrecen muchas mejores prestaciones que las actuales traviesas RS, que están formadas por dos bloques de hormigón laterales unidos por una barra metálica central a la que se denomina riostra. Curiosamente este tipo de traviesas comenzaron a extenderse en el mercado ferroviario a partir de los años 50 después de haber sido probadas con éxito en la Primera Guerra Mundial.

Los trabajos de renovación de la infraestructura se realizarán con una máquina especial acoplada sobre la vía y en horario nocturno para interrumpir lo menos posible el tráfico ferroviario de la línea La Encina-Alicante. Todo el material sustituido será reciclado. Tanto el hormigón como el hierro de la riostra.

A modo de curiosidad cabe indicar que las monobloc son las traviesas que también se están empleando para construir la plataforma del Tren de Alta Velocidad, el Ave. Pero en el tramo de línea convencional comprendido entre Elda y Sax no es la primera vez que se llevan a cabo obras de estas características. En abril de 2003 este diario ya informaba de que en algunos puntos muy concretos del trazado Renfe ya utilizó este tipo de material y los resultados han sido muy positivos.