La Fiscalía ha solicitado en su escrito de calificación provisional que una madre y su compañero sentimental sean condenados a penas de 16 años de cárcel por los supuestos malos tratos que sufrió el bebé de la procesada, que tenía once meses cuando ocurrieron los hechos. En su escrito, el representante del Ministerio Público recuerda que, aunque la niña era sólo de ella y la relación entre la mujer y su compañero era de noviazgo, ambos estaban obligados «a preservar su integridad, ya fuera como madre o como guardador de hecho» porque vivían juntos bajo el mismo techo.

El suceso se conoció a raíz de que la pequeña fuera ingresada hace un año en el servicio de Pediatría del hospital porque no dejaba de llorar. Las exploraciones médicas descubrieron que la pequeña tenía ambos fémures fracturados y que las lesiones se habían producido en fechas distintas, por lo que se dio parte a los responsables policiales que abrieron una investigación que concluyó con la detención de la madre, Eva V. P., y de su compañero sentimental, Miguel I. F.

El fiscal considera que la pequeña presentaba lesiones causadas en cinco fechas distintas. La primera, entre octubre y noviembre de 2006, cuando se produjo la fractura del fémur de la pierna derecha; la segunda, entre el 20 y 25 de noviembre, cuando la agarraron fuertemente de los hombros, hechos que se repitieron entre el 28 y el 30 de noviembre, y entre el 2 y el 4 de diciembre, que dejaron en la niña «hematomas y erosiones de diversa evolución».

Por último, en la tarde del 5 de diciembre, según el escrito de calificación, «aprovecharon la impunidad que les otorgaba su domicilio» para volver «a golpearla con la misma violencia, produciéndole una fractura del fémur de la pierna izquierda».

Los hechos son constitutivos para el acusador público de cinco delitos de lesiones y de un delito contra la integridad moral por los cuales solicita penas que suman 16 años de cárcel para cada uno de los procesados. La Conselleria de Bienestar Social retiró a la madre la tutela de la pequeña, a raíz de estos hechos, a la espera de que se produzca una resolución judicial.