L a Comunidad de Riegos de Levante acaba de cerrar una de las etapas más complicadas de su historia con la cancelación de su deuda histórica que, a principios de la década de los 90, ascendía a 12 millones de euros, 2.000 millones de pesetas de las de entonces.

La mayor comunidad de regantes de España atravesó durante la década de los 80 una crisis social y económica que se tradujo en la creación de una deuda de 2.000 millones de pesetas con un interés del 20% por impago al Estado de las dotaciones procedentes del Trasvase Tajo-Segura.

La gestora encabezada por el entonces alcalde de Elche, Manuel Rodríguez, puso en marcha un proyecto de viabilidad que 17 años después ha supuesto la cancelación total de aquella deuda. «A fecha de hoy, es cero», afirmó ayer el portavoz de Riegos de Levante y miembro de la comisión económica que llevó adelante el citado plan de viabilidad - recordó - hemos estado pagando agua servida en 1987 que no se había liquidado».

El acontecimiento se produce en vísperas de la asamblea ordinaria que se celebrará mañana, sábado, y en la que se presentará el estado de cuentas a 31 de diciembre de 2006. Aunque en esos números todavía se refleja una pequeña parte de aquella deuda, se informará

Urbina explicó que la clave de la recuperación económica ha sido el establecimiento de un canon de mantenimiento que ha permitido hacer frente a los gastos ordinarios de la comunidad hubiese o no hubiese agua, como ha sucedido durante los dos periodos de sequía acaecidos desde entonces: el de 1993-95 y el actual. «Si el gasto de aplica al agua y no riegas, creas deuda y eso no puede ser», argumentó.

Los ingresos derivados de esta cuota se han visto complementados con los procedentes

El portavoz señaló que, con el pago de los intereses, la comunidad ha desembalsado alrededor de 4.000 millones de pesetas ya que, durante los primeros años, los ingresos procedentes del pago de las cuotas de mantenimiento no llegaban ni para amortizar los intereses.

Una operación financiera para la apertura de pólizas con entidades bancarias permitió saldar la deuda con la Administración central y rebajar el interés del 20% a una franja que ha oscilado entre el 4% y el 6%, según los