La Sección Séptima de la Audiencia Provincial de Alicante, con sede en Elche, acogió ayer el juicio contra un acusado de violar a dos jóvenes menores de edad y abusar de otros ocho, además de atropellar a un guardia civil que trató de detenerlo el 26 de octubre de 2013, cuando se descubrieron los hechos. La Fiscalía pide una pena de 38 años de prisión por todos estos delitos. Los más graves, la violación de los dos menores. En concreto, en uno de los casos, las agresiones sexuales se realizaron hasta en doce ocasiones.

Todo comenzó a finales del año 2012 cuando el acusado, utilizando un perfil falso, se puso en contacto con el joven. Tras ganarse su confianza, consiguió que le mandara varias fotos a través de una aplicación de mensajería instantánea en las que aparecía desnudo. En abril de 2013, tras un tiempo hablando, el acusado se citó con el menor, con el fin de satisfacer sus deseos sexuales. Al negarse a mantener relaciones, lo chantajeó con difundir las fotografías, por lo que se lo llevó a una zona apartada y lo violó. Y así hasta en doce ocasiones.

No se trata de única caso, pues el mismo modus operandi contactó con otro menor, al que violó chantajeándole con difundir las imágenes que le había mandado. En las otras seis ocasiones, se trata de delitos de corrupción de menores con casos repartidos por toda la geografía española. El acusado, tras contactar con ellos por redes sociales, se ganaba su confianza hasta que conseguía que las víctimas les mandaran vídeos desnudos, masturbándose, o en actitud sexual.

Por el delito de violación continuada a uno de los menores, el Ministerio Fiscal pide 15 años de prisión, a lo que se suman otros 12 años y nueve meses por la otra agresión sexual al otro joven. En los seis casos de corrupción de menores, la Fiscalía exige un año de prisión por cada una de las víctimas. Por si fuera poco, en 2013, cuando un agente de la Guardia Civil iba a detenerlo, el acusado lo atropelló con su vehículo, para evitar esa detención. El agente fue arrojado cinco metros, y, a consecuencia de los golpes, sufrió un traumatismo craneoencefálico, y perdió una oreja, entre otras lesiones, lo que le incapacitó durante 284 días. El Ministerio Público solicita otro cinco años de prisión por atentado contra la autoridad. En total, 38 años de cárcel.

La primera sesión del juicio se celebró ayer, pero aún quedan otras tres. Se trata de un juicio largo dado la gran cantidad de víctimas y la diferente tipología delictiva, ya que no solo se pondrán sobre la mesa las múltiples agresiones sexuales y los casos de corrupción de menores, sino también las lesiones sufridas por el agente de la Benemérita. El acusado se encuentra en prisión provisional desde que fue detenido por las graves acusaciones.