La oposición ha echado para atrás la modificación de Plan General para ampliar la protección arqueológica del centro histórico tradicional. El pleno municipal de este mes se está celebrando hoy, miércoles, tras aplazarlo por el puente de mayo. Una sesión plenaria en la que el PP asiste con dos concejales menos, el edil Luis Ángel Mateo, que hoy se ha hecho efectiva la renuncia de su acta como concejal y Manoli Mora, que se encuentra convaleciente. Con ello, los populares cuentan hoy con siete regidores.
Tras ser aprobado por la junta de gobierno local y haber superado otros trámites, desde la bancada de la oposición han frenado hoy la obligación de extender las catas arqueológicas a más zonas del núcleo urbano, como el Raval y la zona del Puente de Santa Teresa. Pese a que PSOE, Compromís y Partido de Elche han votado a favor, no ha sido suficiente para sacar adelante el trámite, porque esta modificación del Plan General de Ordenación Urbana exige la mayoría absoluta y PP, Ciudadanos e Ilicitanos por Elche se han abstenido.
Desde Ciudadanos han defendido que es necesario contar con un estudio arqueológico de toda la zona planteada antes de lanzarse a una modificación del PGOU y desde el PP han asegurado que no es el momento ahora, en pleno conflicto con el El Progreso y con la intención del tripartito de presentar un contencioso administrativo contra la Generalitat.
El Ayuntamiento había iniciado los trámites, tras requerimiento del Consell, para extender el área de tutela arqueológica a todo el núcleo histórico tradicional. Esto supondría que el Ayuntamiento y la Generalitat tendrá que tener un informe arqueológico previo a conceder cualquier licencia de obras en el barrio de El Raval. Hasta ahora, solo se aplica este criterio en el perímetro comprendido entre la Vila Murada, las Clarisas y el palacio de Jorge Juan y ahora esta área protegida pretendía abarcar la superficie comprendida entre el Parque Municipal y el barrio de El Raval.
Además de abordar este punto y las mociones presentadas por los grupos políticos, Ciudadanos, el PP e Iicitanos por Elche han presentado la moción in voce de la Corredora para detener las obras y dejar sin partida presupuestaria la peatonalización. Algo que han querido seguir presentando esta mañana, pese a que PSOE y Compromís anunciaron el lunes su decisión de hacer una moratoria hasta que haya consenso, pero sin renunciar a las obras.
La sorpresa la ha vuelto a dar el Partido de Elche, socio del equipo de Gobierno. Su portavoz, Jesús Pareja, ha presentado una enmienda para fijar en 90 días el paréntesis para buscar el consenso, no adjudicar las obras hasta que haya acuerdo y, por otro lado, que la junta de gobierno acuerde no acometer las obras de peatonalización hasta que no haya solución del Mercado Central.
Durante una hora han estado debatiendo los grupos políticos, tras un receso del pleno municipal. Finalmente, la oposición ha descartado apoyar el planteamiento de Pareja. Tras ello, el portavoz del Partido de Elche ha acabado presentando una moción de urgencia con las mismas peticiones que las que había realizado en su enmienda anterior y que finalmente ha salido adelante con los votos del tripartito, que contaba con la mayoría, frente al rechazo de toda la oposición.
Con todo ello, finalmente el pleno ha acabado dando luz verde a dar 90 días para buscar un consenso con la Corredora, entendiendo que en ese plazo también habrá una resolución de la Unesco sobre el impacto del Mercado en el Misteri. Además, a petición de Compromís, ha salido adelante la enmienda de dejar sin efecto la partida presupuestaria de la peatonalización en caso de que no haya consenso.
El paso atrás
El lunes anunciaron el alcalde, Carlos González y la portavoz de Compromís,Mireia Mollà, su paso atrás en la peatonalización, sin la presencia del Partido de Elche, pero acompañados de algunos de sus concejales y sin esconder, algunos de ellos, la cara de pocos amigos. Todo ello, tras una reunión convocada de forma urgente con las asociaciones y tras una intensa mañana de reuniones también dentro del propio Ayuntamiento para abordar el asunto.
De hecho, hasta en las últimas horas se llegó a hablar en círculos municipales de que una moción de censura impulsada por Ciudadanos, que llegó apoyar los presupuestos municipales con la peatonalización de la Corredora, pudiera estar incluso detrás de esta determinación. Una amenaza que podría haber tenido algo que ver en este paso atrás y más aún después de lo ocurrido en el Ayuntamiento de Alicante hace dos semanas. Pero, en eso no quiso entrar el alcalde en su comparecencia pública y tan solo apuntó a que cuando «llevaba tres horas en el Gobierno ya me dijeron que se estaba cocinando y ahora han pasado ya tres años...»
