Llegó hace cuarenta años a Elche desde Ciudad Real y uno de los primeros platos ilicitanos que probó estaba compuesto por anguilas de El Hondo al ajo, pimentón y patatas. Aquel sabor sorprendió positivamente a Manuel Inarejos, que aprendió una receta que, cuatro décadas después, le ha servido para imponerse en la segunda edición del certamen culinario Súper Chef Senior, que ayer vivió su final. El jurado, compuesto por destacados representantes de la gastronomía local, valoró su apuesta por productos típicos ilicitanos y la tradición de la receta.

La segunda posición del certamen fue para Manuel Rodríguez, con un arroz de marisco con alioli. Curiosamente, fueron los dos únicos representantes masculinos los que recibieron una mejor valoración en la final, en la que estuvieron acompañados por siete mujeres. Los nueve finalistas consiguieron su pase para la última ronda después de haber superado la criba de la semana pasada, entre el total de 37 concursantes de más de 60 años que se han presentado a este certamen, organizado por la Concejalía de Mayores.

El jurado destacó la gran igualdad entre las nueve recetas aspirantes al primer puesto. Tales fueron las dificultades para decantarse por un plato u otro, que en la tercera plaza del podio se produjo un empate entre la fideuá de ganchitos móviles de Gabriela Grau y el pastel de marisco de Pilar Sanz. «Es un placer para mí, que estoy cerca de los 90 años, que me hayan dado este delantal de cocinera. Lo voy a llevar al supermercado y también al baile», señalaba con orgullo la autora del pastel de marisco.

El concejal Carlos Sánchez, quien siguió la final acompañado por el alcalde, Carlos González, destacó la importancia que el concurso le otorga al talento que tienen los mayores. «Creo que pueden aportar mucho a nuestra sociedad y debemos aprovecharlo», añadió el edil, que en la ceremonia de clausura que se celebrará próximamente entregará a los participantes un libro con las recetas que han formado parte de un concurso que apuesta por recuperar la tradición culinaria de Elche y que también abre las puertas a las enriquecedoras aportaciones que ha traído la emigración. Los concursantes, por su parte, han contado estos días con un espacio para relacionarse y mostrar todo su talento en la cocina.