La Comunidad de Riegos el Progreso ha presentado una denuncia en el juzgado contra el propietario de una finca de la sierra de El Molar, en La Marina, que, según los regantes, está obstaculizando el paso del agua por una acequia de la entidad, que da servicio a un centenar de comuneros de esta zona del Camp d'Elx. Los afectados aseguran que el problema se lleva arrastrando varios meses y que se puede empeorar de cara a la campaña estival, cuando necesitan aumentar el número de riegos. Es por ello que la titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Elche ha autorizado a los regantes a entrar en la finca particular para limpiar la acequia, en tanto que se resuelve el conflicto en sede judicial. El juicio está previsto para el 21 de mayo.

La situación es insostenible, indicaba ayer el presidente de la Comunidad de Regantes Riegos El Progreso, Pascual Serrano, que explicaba que «el propietario de la finca ha puesto problemas al paso del agua desde que la adquirió, y está generando un grave perjuicio a los regantes, cuando todos sabemos que se debe permitir el paso del agua».

Los regantes acudieron ayer por la mañana a la finca, acompañados por dos patrullas de la Guardia Civil, con el fin de dar cumplimiento al auto firmado por la magistrada esta misma semana, y que les autoriza a entrar en la propiedad privada con el único objetivo de poner fin a la obstrucción existente en el canal de riego que transcurre por la misma. Iban con el acompañamiento de la Guardia Civil de Santa Pola.

Una vez en la finca, los agentes de la Guardia Civil dialogaron con el propietario para que accediera voluntariamente a abrir la puerta y evitar así que se tuviese que hacer uso de las tenazas para abrir las puertas.

No obstante, una vez que el propietario comprobó el auto judicial que aportaron los agentes, se advirtió que existía un error. Y es que el número de finca que figuraba en el documento firmado por la jueza no se correspondía con el terreno por el que pasa la acequia de riego afectada. Esta circunstancia impidió a los regantes llegar ayer hasta el punto de la acequia que está bloqueado, al que tendrán acceso una vez que el juzgado realice la corrección necesaria, para que la medida cautelar se pueda llevar a cabo con todas las garantías legales.

Pascual Serrano destacó que «nuestro propósito sólo es que se cumpla la ley». Por eso, pusieron en marcha los mecanismos para poder regresar a la finca, con los papeles en regla, lo antes posible, y restablecer el suministro de agua de riego en la zona.

En la actualidad pasa un pequeño caudal por la acequia, pero no todo el que debería para poder dar un servicio óptimo a los regantes de la zona, que son un centenar. El motivo, según exponen los regantes, es que el propietario de la finca privada obstaculiza el paso del agua echando piedras y tierra.

Por su parte, el denunciado indica, en un cartel ubicado en la finca, que el terreno es de su propiedad al 100%, que el canal está roto y que no autoriza la entrada de nadie en la parcela.