Las Policía Nacional se incautó hace unos días, en una nave del polígono de Carrús, de decenas de pares falsos que imitaban calzado de la firma ilicitana Slowwalk. La denuncia partió de la propia empresa, cuando uno de sus representantes observó las copias en una zapatería de la ciudad. Los modelos falsificados eran idénticos en cuanto a forma y colores al original. Sin embargo, el precio, y finalmente las calidades del producto, hicieron levantar las sospechas, hasta que se confirmó que eran falsos. Se trata de los dos modelos estrella de la firma, según manifestaron ayer fuentes cercanas a la empresa. En concreto, el modelo Morvi, uno de los dos copiados, se vende por cerca de 80 euros, mientras que la falsificación salía por apenas 30.

Estas cifras dan una idea de las pérdidas económicas que sufren las empresas cuando modelos de imitación se ponen a la venta bajo la apariencia de los originales. También es especialmente llamativo el hecho de que, en este caso, lo falsificado no son las marcas más conocidas, sino un producto de una empresa ilicitana que está teniendo un especial repunte en ventas, y que también se comercializa en otros países, según fuentes de la firma ilicitana.

La operación policial se desarrolló durante toda la mañana del martes, en una nave en el mismo centro del polígono, en un lugar de máxima visibilidad, en la misma avenida de Novelda. Durante el registro, la abogada de la firma ilicitana acompaño a los agentes de la Policía Nacional para mostrar los modelos originales de la empresa ilicitana, registrados y patentados, y certificar que, efectivamente, se trataba de copias de esos productos cuyo derecho de explotación, como subrayan, les pertenece.

Así, las falsificaciones copiarían dos de los modelos estrella de la firma ilicitana, que se está dando a conocer por realizar calzado ecológico.

El hecho de que se vendiera a más bajo coste, con menor calidad, y bajo la imagen de la marca, no solo les perjudica económicamente, aseguran, sino que también afecta a la «imagen de marca», pues podría darse el caso de que los clientes no supieran que se trataba de falsificaciones y se jugara con su atractivo precio, más de la mitad más barato que el original, para usarlo de reclamo.

Investigación

Una vez que la Policía ha recabado todo el material, se examinará en el laboratorio de la Policía Científica para contrastar su falsedad, con el fin de remitir el informe pericial al juzgado e iniciar acciones penales contra los responsables. Así, con un muestreo aleatoria del material incautado y contrastando la información con el modelo original, los agentes podrán certificar que, tal y como denuncia la empresa, se trata de pares de zapatos falsificados.