Cuatro días han estado construyendo con mimo el puente con palos de helado Pisoni los estudiantes de la Universidad Miguel Hernández (UMH) Rafael García, Carlos Sánchez y Francisco Marín. El mismo mimo con el que en la tarde de ayer fueron colocando planchas metálicas sobre la estructura de madera, la primera de ellas de 28 kilos y las siguientes de 20. Todo ello para que el Pisoni se fuera abajo en cuestión de minutos. Eso sí, antes de derrumbarse, fue capaz de acreditar que era capaz de soportar hasta 948 kilos, 160 más que el ganador de la edición del pasado año, sin ir más lejos.

Mientras los estudiantes de la UMH iban colocando una a una las planchas sobre su estructura, la respiración se cortaba en las gradas que hay en la explanada entre el edificio Arenals y la pista de hockey sobre patines del campus ilicitano. Después de que el puente resistiera, los integrantes de la comunidad universitaria, que sigue con auténtica devoción este certamen, que ya cumple quince años, rompían a aplaudir. Sobre todo, con las últimas planchas, en unos instantes en los que la tensión era máxima. Hasta 47 veces repitieron esta acción los estudiantes del equipo Los Solfamidas, en un claro guiño a Los Simpson. Fueron los primeros en participar en la categoría absoluta del concurso y dejaron el pabellón tan alto que ninguno de sus rivales pudo superarles a continuación.

La tarde se fue desarrollando en un ambiente festivo mientras los competidores iban apilando planchas metálicas sobre sus puentes, unas estructuras a simple vista frágiles, no así en la práctica. Las gradas estaban llenas y los jóvenes periodistas de la radio de la UMH se encargaban de animar el ambiente, mientras otros estudiantes se decantaban por hacer un descanso para jugar a los dardos o al futbolín, mientras sonaban machacones acordes de reguetón entremezclados con otros clásicos como La Macarena.

La decimoquinta edición del concurso que organiza la Delegación de Estudiantes de la Escuela Politécnica Superior de la UMH tenía como principal novedad la presencia de una categoría destinada para los centros educativos de Secundaria. En esta nueva categoría el proyecto que resultó vencedor fue el presentado por el equipo de Aspe El Gnomo, que fue capaz de soportar hasta 868 kilos, por lo que el año pasado habría derrotado al campeón absoluto.

3.500 palillos recibieron los participantes para desarrollar sus creaciones. El certamen estaba abierto a toda la comunidad universitaria de la UMH y a cualquier estudiante universitario del territorio nacional. De hecho, este año han participado alumnos procedentes de las universidades de Alicante, Córdoba y València y hasta un estudiante de la UMH que en estos momentos se encuentra en Irlanda, ha enviado su puente desde el extranjero.

Al margen de la categoría de peso, que es la principal, el certamen también cuenta con otras dos categorías, la de estética y la de movilidad. En la primera de ellas, el ganador ha sido el puente El Pilar. Por su parte, en movilidad el proyecto vencedor ha sido Lveitor3000.