La sección de Grafística y Vandalismo de la Policía Local de Elche, integrada en la Unidad de Medio Ambiente, identificó hace unos días a un hombre de 32 años como presunto autor de pintadas en contenedores tras una denuncia que presentó Urbaser, la concesionaria del servicio de Limpieza y Recogida de Basuras de Elche. Esta sección lleva trabajando apenas unos meses, como ya avanzó este diario, y gracias al trabajo de los dos peritos calígrafos que la componen, se ha podido elaborar un informe técnico para identificar al autor de los actos de vandalismo. Este informe se elaboró a instancias del Grupo de Delitos contra el Patrimonio de Policía Nacional , ya que la empresa de limpieza presentó la denuncia en la Comisaría, tal y como trasladaron desde la Jefatura.

Las pruebas de los calígrafos de la Policía Local permiten, gracias a los conocimientos de la unidad y al equipamiento del que disponen en las instalaciones los agentes, analizar estas pintas y determinar su autor de acuerdo a las diferentes pruebas recogidas. El trazado de las pintadas, la forma, y otros muchos aspectos son examinados incluso a vista de microscopio para buscar elementos únicos. Una especia de «huella dactilar» de la caligrafía que es única en cada persona.

Urbaser denunció hace unos meses ante la Policía Nacional, por unas pintadas que se registraron el pasado verano. Los actos vandálicos contra el mobiliario urbano son una constante, y cada contenedor puede alcanzar un coste de varios miles de euros. La limpieza de estos elementos también sale cara, y es que las estimaciones de la propia Urbaser de limpieza de pintadas en elementos del mobiliario urbano y edificios municipales asciende a unos 130.000 euros al año.

En la mayoría de estos casos, identificar al autor es la tarea más complicada, y la que origina que estos actos queden impunes. Por eso, la unidad de Grafitis y Vandalismo se ha especializado para identificar, localizar y detener a los responsables, para que corran con los daños ocasionados por este tipo de actos.

Los informes realizados por los agentes locales podrían llegar a ser una prueba judicialmente válida, si el juzgado pide informes de este tipo, por la formación con la que cuenta la unidad. Y es que en muchas ocasiones las pintadas, lejos de ser actos puramente vandálicos sancionados con una multa administrativa, pueden llegar a ser incluso un delito.

De hecho, la Policía Nacional ya se ha puesto en contacto con la unidad local para solicitar, en caso de que sea necesario, la colaboración de los agentes para identificar a los autores de las pintadas fascistas en la mezquita de Carrús, por lo que se les podría acusar de un delito de odio en caso de que se logre dar con los autores.

Esta primera detención facilitada gracias al trabajo de la nueva unidad de la Policía Local llega tras tan solo unos meses en funcionamiento, y los agentes trabajan ahora en otros casos donde se han producido daños por pintadas, por lo que las operaciones se incrementarán en las próximas semanas.