El tirón de las inversiones municipales ha empezado a tener sus efectos en la carga de trabajo del Ayuntamiento de Elche para dar salida a los contratos públicos. El volumen de los expedientes tramitados para sacar a licitación obras o servicios que dependen de la Administración local se ha disparado desde 2015. Algo que ha obligado ya al tripartito a reforzar el personal en el área de Contratación para tratar de acortar los plazos y dar una respuesta más rápida a la hora de sacar proyectos adelante por parte de las diferentes concejalías.
En concreto, hace dos años, el departamento municipal tramitó 200 expedientes y el pasado ejercicio registró alrededor de 400, según apuntó la concejal de Hacienda, Ana Arabid. Este repunte de la actividad contractual obedece, según la edil del área, al incremento de las inversiones municipales de los últimos años, que, a su vez, coinciden con el balón de óxigeno que están teniendo, en general, casi todos los ayuntamientos con motivo de la recuperación económica. Y es que, como ejemplo, en 2017 las inversiones del Ayuntamiento fueron de 6,5 millones y este año serán de 13,4 millones. Una nueva realidad a la que la entidad local están teniendo que adaptarse bajo las limitaciones del Gobierno central a sacar nuevas plazas.
Ante ese a ese aumento de trámites a los que los funcionarios del Ayuntamiento de Elche están teniendo que hacer frente, fuentes municipales hablan incluso de un atasco en el departamento de Contratación para dar salida a los expedientes, hasta de retrasos de cuatro meses para que puedan salir a licitación obras o servicios. Una demora que ha sido, sin embargo, descartada por la edil del área, que asegura que no existe bloqueo alguno, aunque sí que reconoce que se pueden mejorar los tiempos y, el equipo de gobierno está trabajando en ello.
En este sentido, Ana Arabid también incide en que los procedimientos están sujetos a unos plazos legales, que no se pueden saltar. Concretamente, apunta a que los contratos menores pueden salir a licitación en cuestión de semanas, los negociados pueden tardar dos o tres meses y los procedimientos abiertos superan esos tiempos.
De cualquier manera, el volumen de trabajo es evidente en el departamento municipal teniendo en cuenta las estadísticas de expedientes tramitados. De ahí que en 2017, el Ayuntamiento reforzó el departamento con dos profesionales de apoyo y este año tiene previsto aumentar con dos personas más, como mínimo, el área de Contratación. El mantenimiento de la vía pública, de las instalaciones deportivas y de los centros educativos, es, principalmente, el área que más acapara la actividad contractual en estos momentos en el Ayuntamiento de Elche. Sin embargo, a ese aluvión de expedientes detectado en los últimos ejercicios, se sumará este año aún más trabajo extra. Se trata de todos los proyectos que empezarán a moverse a partir de este año, tras recibir los fondos europeos Edusi, con los que el Consistorio ilicitano tiene que invertir un total de 30 millones de aquí a 2023.
La entrada en vigor de la nueva ley de contratación, a partir del próximo mes de marzo, es otro de los desafíos a los que se tendrá que enfrentar el Ayuntamiento ilicitano en su día a día. Una nueva normativa que abandona una visión burocrática de la contratación pública para implementar un modelo de contratación basado en los principios de Transparencia y Eficiencia.
A ello hay que sumar la implantación de la Administración Electrónica también en el área de Contratación, a la que el personal municipal también tendrá que habituarse. En este sentido, la idea también es, según la concejal del área Ana Arabid, que los plazos puedan acortarse y los expedientes salgan a licitación con mayor premura.
