En una semana habrá empezado la Cuaresma y las distintas cofradías y hermandades de Semana Santa de Elche, conscientes de la proximidad de las procesiones, han empezado a preparar a las cuadrillas de costaleros y costaleras, con los ensayos que se están realizando por las noches y las tardes del fin de semana. Un prolegómeno que arranca en una época en la que la crisis de fe hace cada vez más difícil el relevo generacional.

«Esta semana hemos empezado a ensayar, después de hacer la igualá, y vamos justos. Tenemos los costaleros necesarios para el trono, sin relevos», explica el presidente de la Hermandad de María Santísima de la Caridad, Juan José Pastor, que añade que «los primeros ensayos los vamos a hacer en la nave de Carrús, y después nos bajaremos a la iglesia de San Juan, para ensayar con el palio del paso».

La falta de relevos es la tónica general en las cofradías. Prueba de ello es el paso que va a dar la de la Caída, que este año sacará a la Virgen del Rosario con una cuadrilla formada por hombres, ante la imposibilidad de completar la de mujeres, que lo sacaban hasta el año pasado, cuando tuvo que reforzarse con hombres. El capataz general de La Caída, Moisés Martínez, reconoce que «a los jóvenes les cuesta sumarse, ya que cada vez hay menos fe y menos afición». Martínez, que también es capataz en Merced y Pasión, apunta que «este año sólo hemos recibido a un costalero nuevo menor de treinta años».

Pero en Elche hay excepciones. Es el caso de la Santa Mujer Verónica. La presidenta de esta cofradía, Ana Sánchez, destaca que «si el año pasado salimos con 78 costaleras, este año hemos recibido nuevas peticiones, y ya somos 93, por lo que hemos conseguido llenar los huecos y preparar la procesión en mejores condiciones».

Desde la Junta Mayor de Cofradías, su presidente, Gaspar Agulló, destaca que el hecho de que actualmente muchas cofradías estén sacando tronos juveniles sirve para crear afición y que los jóvenes que participan en ellos en un futuro se sumen a las cuadrillas de costaleros. Además, Agulló anima a las entidades a prestar más atención a los jóvenes y a hacerles partícipes de la Semana Santa.

Consejos

Los ensayos sirven para que los costaleros y costaleras aprendan los ritmos con los que sacarán a los tronos a la calle, y para que, poco a poco, vayan acostumbrando sus cuerpos a soportar el peso y evitar lesiones.

Para evitar problemas, las cofradías ilicitanas ponen a disposición de sus costaleros y costaleras la guía de entrenamiento elaborada por profesores de Fisioterapia de la Universidad Miguel Hernández, dentro del programa fisiocostal. Los expertos insisten en la importancia de realizar un entrenamiento antes de someterse al esfuerzo que conlleva ser costaleros. En el programa fisiocostal se indica que los costaleros deben ser conscientes en todo momento de qué zona corporal utilizan para llevar a cabo dichos esfuerzos, y también de la respiración.

A los costaleros se les recomienda realizar entrenamientos tres veces a la semana. Y cada entrenamiento debe constar de tres fases que son las de calentamiento, fortalecimiento y estiramiento.