La guerra interna del Partido Popular de Elche se hace más evidente cada día que pasa. Las heridas del partido que ganó las últimas elecciones municipales, pero que no consiguió los representantes necesarios para conservar la Alcaldía, siguen sangrando, y prueba de ello es que ayer se empezó a escribir un nuevo capítulo con la intención del edil y portavoz adjunto del grupo popular Vicente Granero, de optar a ser el alcaldable del PP en las próximas elecciones municipales de 2019, disputándole el puesto a Pablo Ruz.

En una cafetería del centro, lejos de la sede del PP, según dijo por tratarse de un asunto personal, Vicente Granero dio el paso adelante flanqueado por su compañeros del grupo municipal Justino Delgado y Érica Sánchez, y asegurando contar con el apoyo explícito de la exalcaldesa Mercedes Alonso, que se mantuvo en la sombra, para disputarle el puesto a Pablo Ruz, que en más de una ocasión ha manifestado su deseo de ser el alcaldable popular, y de contar con el respaldo de la presidenta regional Isabel Bonig.

Vicente Granero sostuvo ayer que el 2017 fue un año de cambios en muchos aspectos para el Partido Popular de Elche tras la celebración de la asamblea local en la que salió eligido presidente, por una amplia mayoría, Pablo Ruz. Unos cambios que, aseguró Granero, «no son compartidos por afiliados, simpatizantes y votantes que así me lo han trasladado».

El portavoz adjunto del grupo popular en el Ayuntamiento dijo que «creía y creo que un Elche mejor es posible con trabajo, con esfuerzo y con la dedicación que le otorgué en los cuatro años de legislatura popular».

Granero puso en valor los diez años en los que «estoy trabajando por y para esta ciudad a través del PP de Elche». En este sentido, recordó que ha tenido la oportunidad de estar al frente de la Concejalía de Urbanismo, y ocupar puestos de representación en Pimesa, Aigües d'Elx y Visitelche, por lo que se consideró preparado para afrontar una nueva responsabilidad.

No obstante, Granero admitió ser consciente de que los estatutos del PP son los que son y que, aunque él lo considera necesario, no contemplan la posibilidad de realizar elecciones primarias para escoger el candidato a la Alcaldía de Elche. El portavoz adjunto pidió públicamente un proceso de primarias abierto a los simpatizantes.

Una alternativa para escoger candidato que apenas estuvo en el aire una hora, el tiempo que la dirección del PP de Elche, que preside Pablo Ruz, tardó en recordar que según los estatutos nacionales el órgano que determina las candidaturas locales en ciudades con más de 20.000 habitantes es el comité electoral regional.

Es más, insistieron en resaltar que la máxima responsable del Partido Popular de la Comunidad Valenciana, Isabel Bonig, ya ha avalado la candidatura a la Alcaldía del presidente del PP de Elche Pablo Ruz.

Concretamente, este apoyo se basa en las manifestaciones que Isabel Bonig realizó durante su asistencia a un comité ejecutivo local, que se celebró el pasado 1 de diciembre, cuando trasladó públicamente su respaldo a la candidatura de Pablo Ruz.

Un apoyo que desde el sector del presidente local consideran inamovible, mientras que los que están al lado de Vicente Granero califican de intrascendental, ya que se remonta a una fecha en la que solo Ruz había manifestado su voluntad de ser el alcaldable popular. Ahora el escenario es distinto.

Este nuevo capítulo llega unos meses después de que se cerrase el conflicto abierto en el grupo municipal cuando Pablo Ruz solicitó al Ayuntamiento ser el portavoz del grupo, en detrimento de su mentora Mercedes Alonso, después de arrebatarle el liderazgo en el Partido. Un informe del secretario municipal impidió a Ruz ser el portavoz municipal por no contar el apoyo de todos los concejales del grupo, como en su día tuvo Alonso, que conserva el cargo.