Desde julio del pasado año hasta marzo de 2018, concretamente hasta el próximo 8 de marzo. Este es el tiempo que va a pasar desde que la obra ilicitana de teatro amateur Siete gritos en el mar fue estrenada en L'Escorxador hasta que sus actores se suban al escenario del Gran Teatro. En el periodo que la función lleva en marcha, su crecimiento ha sido constante, como lo demuestran los catorce galardones que ha recibido en los diferentes certámenes en los que ha participado por la geografía española.

Los últimos cuatro premios, sin ir más lejos, llegaron el pasado fin de semana, en un encuentro teatral celebrado en Sevilla. Entre ellos, el de mejor obra, el de mejor director, para Adrián Rodríguez, y el de mejor actriz de reparto, para María José Vives.

El buen desempeño que ha mostrado la obra en todo este tiempo le ha permitido ganarse un hueco en la próxima temporada del Gran Teatro, la correspondiente al primer semestre de 2018. La nueva programación fue presentada el lunes y Siete gritos en el mar compartirá recinto cultural con textos como El cartógrafo, protagonizada por Blanca Portillo y José Luis García-Pérez, o Zenit, de Els Joglars.

«Actuar en L'Escorxador o La Llotja está muy bien, pero el Gran Teatro es lo máximo a lo que aspiramos todos los que nos dedicamos al teatro amateur en Elche», señala Rodríguez. El director de la obra ha puesto en escena un texto del dramaturgo Alejandro Casona, dentro de la labor que realiza en la compañía Teatro en Construcción. Ahora, una vez que lleven Siete gritos en el mar al Gran Teatro, su siguiente proyecto pasa por la adaptación de otro pieza del autor asturiano: La tercera palabra.

La función galardonada está ambientada en los años cuarenta y narra la historia de unos tripulantes que viajan a bordo de un barco por el Atlántico, y que serán invitados por el capitán a una extraña cena de Nochebuena.