Llega el frío y, con él, las precauciones extra para escapar de la gripe. Las vacunas contra el virus se han disparado en los últimos días con la bajada de las temperaturas, que se han hecho de rogar este año, lo que ha provocado que la campaña se retrase con respecto al año pasado. Sin embargo, durante la semana pasada se incrementó notablemente en número de pacientes que acudieron a las consultas a pedir su dosis. Y el personal sanitario prevé que con el drástico descenso del mercurio que se espera para los próximos días, aún habrá más casos de pacientes que demanden la vacuna.

De esta forma, desde el Hospital General de Elche ya se han dispensando más de 14.700 dosis en los diferentes centros de salud que administra. Una cifra que en su conjunto da unos datos inferiores a los de las mismas fechas del año pasado, pero que han registrado un aumento conforme disminuían las temperaturas. El frío tardío que ha caracterizado este otoño está detrás de ese ligero descenso. En las mismas fechas del año pasado, se habían administrado 15.443 dosis. El calor inusual para estas fechas hace que se tenga menos miedo a la enfermedad, que se relaciona con un descenso mayor de las temperaturas.

Por su parte, desde el Hospital del Vinalopó apuntaron a que ya han suministrado más de 20.500 vacunas. El departamento no posee datos del año pasado, por lo que habrá que esperar a que concluya la campaña para ver si superan los datos del año pasado, cuando desde el centro hospitalario apuntan a que fueron los que más porcentaje de población vacunó en toda la Comunidad. La vacunación contra la gripe se torna de especial importancia en pacientes con otras enfermedades en las que podrían producirse complicaciones a causa del virus, y en mayores de 64 años, también para evitar problemas derivados del virus de la gripe, cuyas consecuencias son más graves que las de un simple resfriado común y que podría acarrear complicaciones como una neumonía. Según apuntan desde el Hospital General, se ha cubierto el 37,34% de la población mayor de 64 años.

Por eso, desde los hospitales se incide especialmente entre la población de riesgo, aunque cualquier persona que lo desee puede pedir a su médico la administración de la dosis. Este repunte de personas que la solicitan está ocasionando algunas esperas para recibir la vacuna, aunque nada significativo por el momento.

Desde la Conselleria de Sanidad se prevé suministrar alrededor de 50.000 dosis en los dos hospitales de la ciudad en toda la campaña. Desde las autoridades sanitarias advierten de la importancia de contar con la vacuna, ya que se prevé un fuerte brote a mediados de diciembre.

El año pasado el pico de mayor intensidad de la dolencia se vivió en la Comunidad Valenciana en torno al mes de enero. En los últimos años el inicio de la campaña de vacunación se ha ido retrasando debido a las altas temperaturas que se registran en otoño.

Y es que la gripe es una enfermedad estrechamente relacionada con el frío, por lo que lo único que pueden hacer los pacientes como prevención, además de contar con la vacuna, es abrigarse bien cuando baje el termómetro.