La Fiscalía ha pedido seis años de prisión para un hombre que violó a una masajista en un local de la ciudad. Los hechos se produjeron en febrero de 2016 cuando el acusado se encontraba en un local de masajes eróticos, que en ningún caso contemplaba relaciones sexuales con penetración. Sin embargo, durante un momento del masaje, el acusado se levantó bruscamente, cogió a la masajista y, aprovechando que se encontraba en tanga, consumó la violación.

La mujer pidió de inmediato que parara y, tras alertar al personal del local, el acusado le pidió que guardara silencio y que no contara que la había violado. Según el escrito de acusación de la Fiscalía, tras perpetrar la agresión sexual, el acusado se duchó en el propio local antes de marcharse del lugar.

La víctima no sucumbió al chantaje del agresor y denunció los hechos, que se juzgarán en la Sección Séptima de la Audiencia Provincial de Alicante, con sede en Elche. De hecho, el juicio estaba señalado para esta semana, pero tuvo que suspenderse al no poder contactar con una de las testigos de la agresión.

En este tipo de locales, el cliente está desnudo y la masajista se suele encontrar en tanga. De ahí que la víctima no tuviera tiempo de reaccionar cuando el hombre se giró bruscamente para consumar la violación. Sea como fuere, desde de la Ciudad de la Justicia explican que esta circunstancia no cambia ni un ápice la acusación, de ahí que se le pidan seis años de prisión por un delito de violación. Más bien al contrario. El acusado aprovechó la indefensión de la víctima y el factor sorpresa para perpetrar la agresión, y por si fuera poco luego trató de convencerla para que guardara silencio.

Por desgracia, los delitos relacionados con abusos y agresiones sexuales son los que más casos abarcan dentro de la Audiencia Provincial en Elche. La Fiscalía es implacable en estos casos, donde la violencia sobre la mujer, y más especialmente el abuso sexual, conlleva condenas muy altas para los agresores.