En la nueva era digital, además de los ciberataques a gran escala, en el día a día estamos expuestos a otros peligros por el uso, o más bien, el abuso a veces de las nuevas tecnologías. En internet, tal y como advierten desde la Policía Local de Elche, «el enemigo ya no se ve, es imprevisible». Por ello, hay amenazas a las que los usuarios de las redes sociales están expuestos sin ser conscientes de ello. «Cada vez que se cuelga una foto en internet se deja un rastro informático, una huella digital que es fácilmente localizable. La gente no sabe realmente los peligros que suponen», apunta el inspector de la Policía Local de Elche, Aurelio Delicado.

Ante este panorama, los efectivos de la Jefatura ilicitana ya están concienciando a colectivos y asociaciones sobre la importancia que tiene que la gente no esté constantemente propagando a través de las redes sociales dónde está y qué está haciendo en ese momento o dónde se va el fin de semana. «Hay ojos indiscretos que están realizando una radiografía de toda esa información. Los delincuentes acaban nutriéndose de esa fuente de datos abierta al público», apuntaron desde la Policía Local de Elche.

De ahí que la concienciación en colectivos sociales y también en los colegios se haya convertido en una misión clave para las fuerzas de seguridad ilicitanas.

Es más, también desde la Policía Nacional de Elche, cuyos agentes realizan charlas en los institutos, advirtieron que las plataformas digitales también hace que aquellos que cometen delitos dejen un rastro, que hace que la Policía acabe tocando la puerta. Especial atención requieren los menores y el uso de las nuevas tecnologías, donde los efectivos ya están en sobreaviso. Como ejemplo del alcance que tienen estas amenazas, los ciberataques que afectan con mayor frecuencia a los menores tienen detrás una intención económica, según un estudio del centro Crimina de la UMH. En cifras, las infecciones por malware (software malicioso que daña el ordenador) son las fórmulas más habituales.