La Policía Local de Elche detuvo en la madrugada del sábado al domingo a varios miembros de un grupo de personas que robaron el móvil a un empleado de un establecimiento de 24 horas en la ciudad. El grupo le quitó el teléfono en un descuido y, cuando el trabajador se dio cuenta, llamó a la Policía Local. Ante la sospecha de que los autores podrían estar en las inmediaciones, realizaron una batida y al llamar al teléfono, localizaron el sonido en un grupo de personas

Al ser requerido por los agentes para que explicara por qué tenía el teléfono del empleado, el hombre que lo portaba se puso muy agresivo, hasta el punto de que propinó empujones a uno de los agentes, tras lo que fue detenido. Un acompañante trató de impedirlo golpeando al Policía, por lo que tuvo que ser reducido por el otro miembro de la patrulla. Tras conseguir reducir y evitar el lanzamiento de más puñetazos y patadas, fueron trasladados a dependencias policiales. Fruto de la pelea, un agente sufrió heridas leves y se registraron daños materiales en gafas y aparatos de telecomunicaciones.Dispositivo Policial

La Brigada Nocturna se refuerza especialmente los fines de semana, y forman parte del dispositivo contra altercados, drogas y botellones que realiza la Policía Local. Los agentes han intensificado en las últimas semanas los controles contra el consumo de alcohol en la vía pública en los ya considerados los principales puntos calientes de la ciudad. Estos espacios de consumo cambian sustancialmente entre lo que sucede de lunes a viernes y lo que pasa los fines de semana. Entre semana, están más focalizados en los barrios, mientras que los sábados y los domingos se trasladan al centro, donde se sitúan la mayoría de locales de ocio nocturno. Así, en parques como el Primero de Mayo, en Carrús, y el 9 de Octubre en la zona de Doctor Sapena, la Policía Local ha redoblado la presión y se han levantado hasta 20 actas entre semana por el consumo de alcohol en la vía pública.

Si bien en estos puntos no se producen grandes aglomeraciones, sí es frecuente, a diario, encontrar pandillas con las habituales litronas desde finales de la tarde y durante la noche, pese a que el consumo está prohibido en la vía pública. Una conducta que despierta las críticas de vecinos, ya que se trata de espacios públicos frecuentados principalmente por niños. Otro de los puntos donde se concentra el consumo de alcohol es el parque 9 de Octubre. Este parque cuenta con numerosos grupos de jóvenes en las zonas deportivas y de ocio pero, al caer la noche, también es frecuente el consumo de alcohol.

Precisamente, por eso, desde la Policía Local se está intensificando la vigilancia y el levantamiento de denuncias, para acabar con estas conductas y que no haya problemas ni altercados.

La situación cambia radicalmente los fines de semana. Las zonas con mayor incidencia son el aparcamiento de Candalix, donde muchos hacen botellón en el coche; el parque Jaume I, el principal foco durante las fiestas, por ejemplo; e incluso el Parque Municipal, donde la oscuridad de la noche y la menor presencia policial, al no poder entrar con el coche patrulla, hace que algunos de los jóvenes crean que hay menos controles. La situación también se repite en las vísperas de festivos. De hecho, el miércoles por la noche, coincidiendo con el puente de la Hispanidad, decenas de jóvenes se concentraban en Candalix para hacer botellón.