La Policía Nacional de Elche investiga si el asalto a un cajero registrado en la madrugada de ayer en la calle Ilicitano Ausente, en el entorno de la Plaza de Castilla, estuvo perpetrado por una banda especializada que ya ha cometido varios de estos asaltos en varios puntos del país. De hecho, en los últimos tiempos también se han registrado casos similares en otros puntos de la provincia. Los ladrones trataron de acceder al dinero del cajero reventándolo con una explosión de gas, si bien no consiguieron su cometido, según la Policía Nacional. El dinero se encontraba en el interior de la sucursal, más resguardado de lo que creían, por lo que el boquete que dejó la detonación no fue suficiente para lograr abrir la caja.

Lo que sí se registraron fueron graves daños en las instalaciones de la sucursal. Efectivos del Parque Comarcal de Bomberos tuvieron que intervenir para ventilar el local, por la presencia de gases tóxicos y certificar que no había daños en la estructura más allá de la zona reventada. Los agentes recogieron ayer diversas pruebas en el lugar de los hechos. La duda estaba en si se podría recuperar el vídeo de la propia cámara del cajero, que quedó muy afectada. Además, la investigación se centró en localizar otras de las cámaras de seguridad de comercios y recintos cercanos, que pudieran haber captado a los ladrones, junto a las pruebas localizadas por la Policía Científica.

Pese a que la explosión se produjo de madrugada, alrededor de las 4.20 horas, los agentes también interrogaron a vecinos con el fin de obtener algunas pistas. La explosión despertó a buena parte de los residentes del propio inmueble donde se produjeron los hechos, y de edificios colindantes.

Lo que está claro es que los autores -la Policía descarta que se trata de una sola persona- no son aficionados. Varios robos con el mismo modus operandi es lo que pone el foco en esta banda organizada, si bien no se han descartado otras líneas de investigación por el momento. Según fuentes policiales, los robos con explosiones es la técnica utilizada en los últimos meses en muchos de los casos registrados en otros puntos. Reventar el cajero de esta forma les da acceso, cuando lo consiguen, a la caja donde se guarda el dinero de forma rápida, lo que facilita la huida. Los ladrones suelen elegir altas horas de la madrugada y zonas poco concurridas, para evitar ser sorprendidos y también para facilitarles la huida.

El suceso no pasó desapercibido en el barrio. La zona del cajero está precintada desde ayer y los operarios trabajaban para devolver la normalidad a la sucursal y recuperar su labor habitual. La investigación continúa abierta, por lo que habrá que esperar a que siga su curso para conocer si los agentes logran dar con los autores del robo y saber si se les imputan más delitos.