Los agentes de la Policía Nacional de Elche han detenido a dos hombres acusados de pertenecer a una red de compraventa de teléfonos móviles robados. Lo curioso del caso es que fue el GPS de uno de los teléfonos sustraídos el que llevó a los investigadores hasta la tienda de informática donde se compraban estos terminales para posteriormente revenderlos a otra persona que los colocaba entre los clientes. Precisamente, el regente de este establecimiento y el otro implicado fueron los detenidos por la Policía. Durante el registro de la tienda, se localizaron varios terminales, con un valor en el mercado de más de 5.000 euros.

Fue una de las afectadas la que dio la voz de alarma tras desaparecerle el móvil en Torrellano. La víctima denunció los hechos y, gracias a la aplicación de seguridad que permite rastrear el teléfono a través del GPS, pudo ver que su móvil se encontraba en esta tienda de informática. Hasta allí se personó con los agentes, y pudo identificar su teléfono.

Los terminales encontrados son de alta gama, por lo que, al parecer, se dedicaban a obtener móviles caros para sacarles un mayor rédito en su reventa en el mercado. Paradójicamente, son este tipo de teléfonos los que cuentan con ese añadido extra de seguridad que permite localizar los terminales por vía satélite.

Por tanto, desde la Policía Nacional recomiendan a los usuarios de este tipo de teléfonos que configuren las opciones de seguridad para poder seguirles la pista en casos de pérdida o robo. En los sistema más avanzados, incluso, está permitido el bloqueo remoto del terminal y el borrado del teléfono, para que el ladrón no pueda acceder a contenido privado como fotografías, conversaciones o mensajes.