? Entre los muchos químicos que se encuentran en el sótano de la Unidad de Farmacia, hay unos que están mucho más protegidos que el resto: los estupefacientes. Su uso en medicina se reduce a tratamientos contra el dolor o enfermedades graves, y su control es muy estricto. Tanto que, pese a que ya es necesario contar con un código de seguridad para acceder a la unidad de Farmacia, este tipo de medicamentos se encuentran especialmente protegidos en una caja fuerte, a la que solo tiene acceso una reducida parte del personal para evitar problemas.