El Museo Paleontológico de Elche (MUPE) ha expuesto una serie de fósiles que fueron encontrados en un contenedor de basura en los Arenales del Sol a finales de septiembre. La muestra está en la entrada del propio centro cultural, en el área de Los Secretos del MUPE. Este espacio, que surgió hace seis años, tiene como objetivo mostrar piezas relevantes, que son el resultado de las últimas investigaciones, pero que esta vez tiene un fin diferente.

La peculiaridad de este conjunto de piezas expuestas radica en que fueron recuperadas de un contenedor de basura y, a su vez, donados al museo ilicitano por una estudiante del grado de Geología de la Universidad de Alicante. En este sentido, el centro museístico reclama una mejora en la gestión del patrimonio paleontológico, poniendo el foco en un conjunto de fósiles entre los que destaca un ejemplar perteneciente al grupo de los ammonites. Se trata de cefalópodos extinguidos hace 66 millones de años, que se desarrollaron en los mares en la época en la que los dinosaurios poblaban la Tierra. Estos fósiles son bastante frecuentes en el registro fósil de la provincia. Por este motivo, la exposición sirve para lanzar un mensaje de reflexión.

La directora del MUPE, Ainara Aberasturi, aseguró que ahora mismo la regulación no les permite ir a recoger fósiles si no están vinculados a una prospección o un permiso, pero que en el pasado se hacía con naturalidad. Asimismo, comentó que «existen ejemplares similares a estos que son recogidos habitualmente por aficionados y curiosos, sin percatarse del posible impacto sobre los yacimientos y la consiguiente pérdida de información».

Iniciativa

El MUPE va a sacar 17 réplicas de fósiles de su centro cultural, que se mostrarán en otros tantos establecimientos de la ciudad. Las réplicas estarán en los establecimientos desde el 16 hasta el 31 de octubre.

La mayoría de comercios han sido seleccionados por la proximidad con el museo ilicitano y habrá también en la calle Corredora. El MUPE ha escogido comercios con un escaparate adecuado para mostrar las piezas.

El objetivo es buscar una simbiosis entre la ciudadanía, los establecimientos y el museo. Los fósiles irán acompañados de unas fichas explicativas para informar sobre ellos. Se mostrará desde una reconstrucción de un cráneo de un dinosaurio hasta un reptil marino, entre otros. «Se está buscando el vínculo entre el establecimiento y el fósil, para que tengan conexión», apostilló la directora del museo.