Un motorista perdió anoche la vida en un accidente de tráfico ocurrido en la carretera CV-865 que une Elche con Santa Pola, según fuentes de la Guardia Civil de Tráfico. Según fuentes de emergencias, la víctima conducía por la nueva rotonda situada a la altura de Valverde cuando, al parecer, se saltó la glorieta que hace apenas dos semanas empezó a construirse en la zona.

El siniestro ocurrió a las 20.30 horas, cuando en la zona apenas había visibilidad, por lo que, tal y como apuntaron fuentes de la investigación, el motorista, de 29 años, circuló en línea recta sin percatarse de la existencia de la rotonda. Hasta el lugar del siniestro se desplazaron dos unidades del Servicio de Atención Médica de Urgencia (SAMU)y durante varios minutos trataron de reanimar al hombre, sin que finalmente pudieran hacer nada por salvar su vida. Efectivos de la Policía Local también se trasladaron en un primer momento hasta la zona hasta la llegada de la Guardia Civil de Tráfico que se ha hecho cargo de la investigación y de regular el tráfico en la carretera.

Según fuentes policiales, el motorista iba indocumentado y al parecer residía en Santa Pola.

Las máquinas tomaron hace dos semanas la calzada a la atura del acceso a la pedanía de Valverde para construir esta glorieta. Una intersección considerada como uno de los puntos más conflictivos del vial y que más accidentes de tráfico aglutina. El objetivo de las obras, competencia de la Generalitat Valenciana, ha sido cerrar las intersecciones que hay abiertas a lo largo del recorrido para acostumbrar a los conductores a esta nueva fórmula para cambiar de sentido.

De esta manera, el Consell ha optado por esta actuación como medida transitoria hasta que se ejecute el desdoblamiento que hay proyectado en toda la carretera. Además de querer habituar a los conductores, la intención del Consell también pasa por reducir la velocidad en este punto negro. No se descarta tampoco que se realicen actuaciones similares en otros puntos antes de que llegue el desdoblamiento. Precisamente, la sustitución de las medianas actuales por las rotondas cerradas será una de las principales medidas que traerá consigo las obras de duplicación de la calzada.

La idea es diseñar cinco tramos diferentes con el fin de resolver la problemática actual de la carretera desde el punto de vista de la seguridad vial. Esta carretera registra numerosos accidentes al cabo del año, y una gran congestión durante el verano, cuando se producen miles de desplazamientos. De hecho, está catalogada en la Generalitat Valenciana entre las carreteras que registran un tráfico que supera los seis millones de vehículos al cabo del año.

Antes de que acabe el año está previsto que comiencen las obras de desdoblamiento en la carretera perteneciente a la Santa Pola y hasta 2019 no está estimado que empiecen en el tramo ilicitano.