Otra de las novedades en cuanto a los siniestros y accidentes que están aplicando las autoridades policiales, y que sirve a la Fiscalía para determinar la acusación, pasa por una fórmula matemática que permite calcula con exactitud la tasa de alcoholemia en el momento del accidente. Los agentes efectúan una primera prueba, de la que extraen un primer resultado. Media hora después, se realiza una segunda.

Con ambos datos, y a través de la curva de evolución del alcohol en aire expirado, se calcula de forma matemática el nivel en el instante del accidente. Una método matemático válido judicialmente.

Esto es especialmente importante en accidentes donde el conductor se da a la fuga. Precisamente, en la mayoría de casos, para que no descubran que conducía bajo los efectos del alcohol. Según apuntan desde la Fiscalía de Seguridad Vial, el alcohol tarda unas cuatro horas en eliminarse por completo del cuerpo, por lo que es posible saber la tasa en el momento del siniestro si la Policía da con el infractor en ese periodo. En los últimos meses, ha sido especialmente relevante en los múltiples atropellos a ciclistas en los que los conductores se han dado a la fuga y/o conducían bajo los efectos del alcohol. Especial relevancia están adquiriendo también las pruebas de detección de drogas, que se realizan desde hace muy poco tiempo y requieren una formación especial por parte de los agentes.