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El Registro Civil acumula 10 meses de espera para poder casarse en Elche

Las colas se han reducido con el refuerzo de personal pero aún están lejos de otros organismos, como el de Alicante, donde los tiempos caen a la mitad

La Ciudad de la Justicia, donde se ubica el Registro. matías segarra

Las parejas que deseen casarse en el Registro Civil de Elche deben esperar, al menos, más de diez meses para la ceremonia en la Ciudad de la Justicia. Solo para iniciar el expediente quien pidiera cita ayer la obtenía para el 24 de enero. Importante recalcar que esto es solo para comenzar con el expediente y no para la boda. Una espera que sigue generando malestar entre los usuarios, pero que desde el propio Registro Civil valoran como positiva, ya que las colas para celebrar enlaces han llegado a superar los 15 meses.

Una vez abierto el expediente, suele tardarse unos dos meses en establecer el día en el que darse el sí quiero, una fecha que, en septiembre, se está fijando para enero. Actualmente, las ceremonias de bodas se celebran alrededor de tres viernes al mes, en lugar de dos, para acelerar la lista, y cada uno de estos días se atiende a una veintena de parejas. Para las «bodas exprés», en las que los interesados no requieren ceremonia y se trata tan solo de firmar los papeles del matrimonio civil, se mantienen los martes, aunque desde el organismo apuntan que apenas hay demanda y que estos casos se reservan para bodas rápidas en las que la necesidad de contraer matrimonio es inminente, ya sea por enfermedad de uno de los dos miembros de la pareja, o por otras causas que requieran la formalización de la unión de forma rápida. Y es precisamente este grupo el que más sufre la espera, pues esos cuatro meses de cola para iniciar el expediente, más el tiempo que se tarda en prepararlo, es un hándicap.

«La única esperanza es ir actualizando la web para ver si hay alguna cancelación que posibilite adelantar el día para comenzar el expediente». Así lo apuntaba esta semana una pareja, que rehusó dar sus nombres. «Necesitábamos una fecha urgente, por lo que en abril conseguimos la cita. Queríamos casarnos en verano, porque nos hacía ilusión casarnos en la playa, pero no nos daban cita hasta precisamente después del verano. Conseguimos pillar una cancelación, y aun así nos la dieron para finales de septiembre, así que lo que hicimos fue celebrar la boda en agosto, aunque no estuviéramos casados formalmente hasta ahora», añaden.

Pese a que desde el Registro Civil de Elche señalan que estas cifras se encuentran dentro de la normalidad y que incluso son más bajas que antaño, lo cierto es que en otras ciudades, como en Alicante capital, hay un periodo de espera muy inferior, la mitad que en la localidad ilicitana. De hecho, el 24 de enero de 2018 era la fecha que el sistema de cita previa a través de internet daba ayer para iniciar el expediente en Elche, frente al 23 de noviembre de 2017 que daba en Alicante. Cuatro meses frente a dos, y así con el resto de trámites. De hecho, hay parejas que han optado por contraer matrimonio en otras demarcaciones, aprovechando el lugar de residencia en otro municipio de uno de los integrantes de la pareja, para acelerar los trámites.

«Mi novia seguía empadronada en casa de sus padres, en San Vicente del Raspeig, pese a que llevábamos unos meses viviendo juntos, por lo que, como la celebración del convite iba a ser en Alicante, iniciamos allí el expediente. Queríamos algo muy sencillo, una boda familiar y sin muchos invitados, por lo que el lugar donde fuera la ceremonia no era un problema. Al juzgado solo fueron los testigos, y luego hicimos una ceremonia de pega en el restaurante para el resto de los invitados», apuntó ayer un vecino de la localidad.

El cambio en las celebraciones nupciales es uno de los motivos por los que los usuarios reclaman cada vez más inmediatez en estos procesos. Antes, la espera en las iglesias para las celebraciones se prolongaba durante meses, incluso años, pero el aumento de las bodas civiles hace que el tiempo de preparación de los matrimonios se reduzca. De hecho, la ceremonia civil también ha pasado a un segundo plano, pues muchas parejas optan por ir al juzgado tan solo a formalizar su situación pero el desarrollo de la ceremonia se realiza en el propio restaurante o lugar donde se desarrolle la fiesta con los invitados.

Personal

El motivo de estos retrasos en el Registro Civil ilicitano es la falta de personal, a la que se une un gran volumen de casos. Todo pese a que el organismo cuenta desde hace meses con el refuerzo de dos funcionarios, que son insuficientes para atender todo el volumen de trabajo, pues ya no son solo expedientes de matrimonio, sino también de nacionalidad, inscripciones de nacimientos y otros muchos trámites que asume cada día el personal de la Ciudad de la Justicia y que colapsa a los funcionarios de Justicia.

Desde el juzgado ilicitano defendieron que esos cuatro meses son el tiempo necesario para reunir la documentación que se solicita en el expediente, como pueden ser las partidas de nacimiento o el certificado de empadronamiento histórico.

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