La basílica de Santa María de Elche recibirá este domingo, 24 de septiembre, a su nuevo párroco y rector, Ángel Bonavía Albeza. La ceremonia será a las 20 horas siendo el obispo de la Diócesis de Orihuela-Alicante, Jesús Murgui Soriano, quien le otorgue posesión canónica. Bonavía estará arropado por numerosos compañeros sacerdotes y los fieles del pueblo de Elche.

Nacido en Aspe el 27 de febrero de 1949. Su primer destino como sacerdote fue en el mundo de la docencia, concretamente en el Colegio Santo Domingo de Orihuela donde estuvo de 1973 a 1980. De 1980 a 1983 ejerció su sacerdocio en Aspe y en las parroquias de Los Hondones. Durante los cinco años siguientes se marchó como sacerdote misionero a la Diócesis de Chimbote, en Perú, hermanada con la Diócesis de Orihuela-Alicante. Tras su regreso pasó por San Juan playa y San Juan pueblo hasta que, en el año 1996, toma posesión como párroco de la iglesia del Sagrado Corazón de Jesús de Elche donde estuvo seis años, cinco de los cuales compaginándolo también con el cargo de Vicario Episcopal responsable de la zona pastoral III, correspondiente al BaixVinalopó. Los últimos quince años los ha ejercido en Villena como párroco de la iglesia de Santiago Apóstol y administrador parroquial de Nuestra Señora de las Virtudes. También fue durante unos años Delegado de Radio y Televisión de la Diócesis de Orihuela-Alicante.

"El encargo del obispo Murgui ha sido una sorpresa. No me esperaba este nombramiento. Pero también recibo el encargo con esperanza. He estado en Elche, en el Corazón de Jesús, y sé lo que significa la basílica de Santa María, por lo que estoy un poco expectante. Mi intención es llegar a Elche después de las fiestas de Villena, a mediados de septiembre", declaró el propio Bonavía en declaraciones a este diario el pasado mes de julio.

"El Papa Francisco ha abierto las ventanas de la Iglesia, utilizando el ejemplo de Juan XXIII, en base al Concilio que decía que hay que abrir las ventanas para que entre el aire, aunque se hiele algo. El Papa ha abierto las ventanas. Siempre se ha dicho que de la Iglesia se esperan signos, detalles que den un poco de sentido a todo lo que se pretende, y con el Papa Francisco se están multiplicando estos signos que indican el nuevo camino de la Iglesia. Ojalá que le imitemos muchos y que él pueda seguir esta labor", añadió en la misma entrevista