El sector de Mercedes Alonso se ha rebelado contra el de Pablo Ruz. Los cuatro concejales afines a la exalcaldesa han dado un plantón esta mañana y no se han presentado a la convocatoria programada para ratificar la reestructuración del grupo municipal del Partido Popular.

Pese a la ausencia de Alonso, Vicente Granero, Erica Sánchez y Justino Delgado, los otros cinco concejales, Ruz, Antonio Luis Martínez-Pujalte, Manoli Mora, Loli Serna, y Luis Ángel Mateo han enviado esta misma mañana el acuerdo firmado por ellos mismos al alcalde para modificar las portavocías del grupo municipal.

El acuerdo pasa por nombrar al presidente del PP ilicitano portavoz y a Antonio Luis Martínez-Pujalte como adjunto, cargos que ocupan todavía la exalcaldesa y Granero, respectivamente.

Con ello, cada uno de los dos sectores se ha vuelto a mantener firme en sus posturas. Así lo dejaban claro ayer los afines a la exalcaldesa. Para ellos, lo único que tiene validez es el Reglamento de Organización y Funcionamiento del Régimen Jurídico Entidades Locales (ROF). Según el artículo 24 de esta ley, «los grupos políticos se constituirán mediante escrito dirigido al presidente y suscrito por todos sus integrantes». A esta normativa es la que se aferran los actuales representantes del grupo municipal. Dicen que la ley es la ley y que está por encima de los estatutos, «que deben regular el ámbito del partido y no el grupo municipal», tal y como argumentó ayer el todavía portavoz adjunto, Vicente Granero.

Sin embargo, los de Ruz están convencidos de que los estatutos son lo que cuentan y que no hace falta una unanimidad para producirse el cambio de portavoces, sino una mayoría. Alegan, además, que el ROF no se refiere a los cambios de portavoz a medio mandato.

Ahora, tras este paso adelante, el alcalde, tal y como aseguró ayer, se encargará de pedir un informe jurídico al no haber recibido las nueve firmas de los concejales en favor de la reestructuración del grupo municipal.