¿Cómo afrontan desde la Orquesta Sinfónica Ciutat d'Elx la temporada que va a empezar?
Con gran ilusión. Es el segundo año que contamos con nuestro nuevo director titular, Mihnea Ignat, que nos ha imprimido un sello diferente y ha cambiado las características de la orquesta. Esperamos afianzar nuestro sonido y contamos con un programa precioso. Empezaremos el 20 de octubre con el concierto para violín y orquesta de Beethoven. Contar con Vicente Huerta es un orgullo para nosotros y la cita nos servirá para homenajear a Miguel Hernández.
El primer concierto iba a contar con la presencia de Elina Rubio pero han tenido que hacer un cambio...
Sí, íbamos a abrir la temporada con ella pero, debido a sus estudios en Estados Unidos, no podrá estar con nosotros el 20 de octubre. Así que lo que haremos será cerrar la temporada con su concierto. Elina Rubio es una de las mejores violinistas españolas de su generación. Con trece años ya se fue a estudiar a la ciudad alemana de Dresde y ahora está haciendo un máster de interpretación en Estados Unidos. También ha ganado muchos premios repartidos por toda Europa.
¿Por qué han decidido ofrecer unos descuentos tan grandes (del 40%) a sus abonados?
Para nosotros los abonados son la joya de la corona e intentamos cuidarlos al máximo. Hemos conseguido ofrecerles estos descuentos del 40% en las tres zonas del Gran Teatro porque creemos que es muy interesante llamar la atención del público ilicitano y del de toda la provincia. Además de estos descuentos, hay otras bonificaciones para jubilados y miembros de familias numerosas, del 25%. Y una oferta de entradas para estudiantes a 6 euros en la zona del paraíso.
Antes citaba a Mihnea Ignat, ¿qué puede decir del director titular de la orquesta?
La figura del director es fundamental en una orquesta profesional. Sobre el descansa el peso de la programación y la calidad artística de los conciertos. Nos imprime su personalidad e impronta. Pasamos una etapa muy buena con nuestro anterior director, Leonardo Martínez. Son periodos que tienen un principio y un final, igual que los ciclos de los entrenadores deportivos.
En 2018 cumplirán 30 años, ¿qué supone para ustedes?
Algo muy bueno. En España hay pocas orquestas que pueden decir que tienen 30 años. Es para que toda la provincia esté de enhorabuena porque nos nutrimos de profesionales de nuestra tierra. La principal reflexión que hago es que en este tiempo han pasado muchos músicos, directores, políticos por el Ayuntamiento? Y la orquesta sigue estando por encima de cualquiera de estas circustancias.
¿Están contentos con el trato que reciben desde Elche?
Sí. Gracias al Ayuntamiento mantenemos la temporada, que es lo que nos aporta personalidad y nos permite ser embajadores de la música de la provincia. Nos gustaría contar con un mayor apoyo económico pero somos conscientes del esfuerzo que se está haciendo para recuperar todo lo que se ha perdido durante los años de la crisis. Vamos a luchar para conseguir mucho más. También quiero destacar el apoyo que recibimos de la Diputación, que nos subvenciona tres conciertos en Alicante, Aspe y Almoradí.
¿Están preparando ya sus actos especiales para conmemorar el 30 aniversario?
Los concentraremos en la temporada 18/19. Ya estamos pensando en los solistas y directores con los que queremos contar. Pretendemos que sea una campaña muy importante. Será un trabajo complicado y por eso hemos empezado a hacerlo con bastante antelación.
¿Cómo ve el futuro?
Con buenos ojos. La OSCE es una realidad que se mantiene. Nuestra aspiración es ser una orquesta totalmente profesional, de la que nuestros músicos puedan vivir. Somos optimistas porque cada vez estamos más cerca de conseguirlo. Nos sentimos cuidados y respetados.
Su colaboración con la UMH también es importante...
Tenemos un fuerte vínculo que nos permite tutelar a la Joven Orquesta de la UMH. Es uno de nuestros proyectos académicos y tenemos muchas ilusiones depositadas en él. Transmitimos nuestros conocimientos y también nos sirve como cantera, porque hay chicos que prometen bastante de cara al futuro.
