El que avisa no es traidor. Las multas por miccionar en la vía pública se han duplicado durante las fiestas de Elche con respecto al año pasado, lo que se traduce en 406 sanciones desde que comenzaron las fiestas. Estas multas forman parte de la campaña especial que anunció la Policía Local para atender a las quejas de los vecinos, especialmente en barrio de la Zapatillera y en el centro, donde se concentran las mayores zonas de ocio y, por consiguiente, los jóvenes y visitantes que acaban miccionando en la vía pública, pese a los aseos portátiles instalados en varios puntos de la ciudad.

Una práctica tan visible como molesta que tuvo su noche «estrella» en la noche de la Roà, cuando los agentes levantaron hasta 115 actas en una sola noche. Contenedores, huertos y garajes son puntos calientes en cuanto a estas prácticas, y fuentes policiales apuntan a que en su inmensa mayoría son varones jóvenes. Las multas van desde los 90 a los 200 euros, pero más allá del importe de la sanción lo que se busca con estos controles es concienciar a ilicitanos y visitantes de las molestias que origina a los vecinos estas prácticas incívicas. El control se ha realizado noche tras noche, y no ha habido día en el que no se hayan levantado denuncias por este motivo, tal y como se desprende de los datos facilitados por la Policía Local.

Junto a las micciones en la vía pública, otro de los problemas que sufren los residentes en torno a las zonas de ocio es de la acumulación de basura y restos de botellones noche tras noche. En este sentido, el número de actas por arrojar basura y cristales a la vía pública llega a la treintena. La mitad, 15, se levantaron durante la noche de la Roà, la de mayor afluencia en las fiestas ilicitanas.

Basura

De hecho, aunque el edil de Limpieza, Héctor Díez, no quiso adelantar ayer datos oficiales, el edil de Fiestas, Pepe Pérez, sí dijo que las cifras que se manejan hasta el momento suponen un incremente del 10% con respecto al año pasado, cuando Urbaser recogió 140 toneladas de basura. Una seña de que este año ha habido más gente en las calles, pero también de que las conductas incívicas no dejan de sucederse año tras año.

Estas son tan solo alguna de las cifras que dejan las fiestas de Elche. Además, otra de las campañas que inició la Policía Local, la del control de establecimientos que venden alcohol a menores, se saldó con una decena de denuncias, la mirad durante la noche de la Roà. A las 13 actas por carretillas el 13 de agosto, se sumaron otras seis el 14.

Las fuerzas policiales esperan que estos datos sirvan para concienciar sobre estas prácticas de cara a futuras celebraciones, pero también en las fiestas que cada fin de semana se concentran en el centro de la ciudad.